En el idioma Thai, “Ta dieu” significa “Un ojo”. Según la creencia popular, ese objeto colocado en el suelo o colgado de la puerta de las viviendas sirve para expulsar a los demonios y mantener a los miembros de la familia libres de todas las maldades.
El señor Tong Van Hia tejiendo "Ta dieu". (Foto: VOV) |
Tong Van Hia, chamán en la aldea de Mong, de la comuna de Hua La, ciudad de Son La, dijo: “Ví a mis abuelos y padres hacer el ‘Ta dieu’ desde muy pequeño, y ahora tengo más de 80 años. Sea para cosas buenas o malas en la vida, lo tejemos y lo colocamos en nuestras casas. Cuando uno va al bosque y piensa en quedarse por la noche, cuando alguien inaugura su nueva vivienda, o cuando en alguna familia una persona está enferma o embarazada, lo primero que hay que hacer es un ‘Ta dieu’ para protegerse de los malos espíritus”.
Existen dos tipos de “Ta dieu”: uno complicado y otro más sencillo. El primero tiene un ojo pero nueve capas inseparables, cada una usa 6 tiras de bambú. Este es difícil de elaborar, y después de finalizar el trabajo, hay que unir al objeto tejido una hoja rota y un trozo pequeño de carbón antes de atar o clavar ese conjunto a la puerta, o a la parte superior de la escalera exterior. Los autóctonos creen que su presencia es vital para espantar a los fantasmas e informar al mundo que en la familia hay un enfermo o un recién nacido. Los dueños de la casa lo hacen con el deseo de evitar que el bebé esté débil y sea quisquilloso y que el enfermo pueda recuperarse.
Un "Ta dieu" de siete ojos. (Foto: VOV) |
El segundo, en forma redonda y de unos 20 centímetros de diámetro, tiene siete ojos, pero solo una capa, y para tejerlo se usan 12 tiras de bambú. Hacerlo es menos complicado. Se utilizan cuatro amuletos de ese tipo y unos tantos palos para clavarlos en las cuatro esquinas de la casa cuando se inaugura una vivienda nueva, o para preparar un ritual para quien decide ir a dormir al bosque profundo. Es como un aviso a los diablos para que no le hagan daño.
El señor Hia contó: “Sé hacer el ‘Ta dieu’ desde los 10 años de edad. Cuando ví a los más mayores de la aldea tejer, aprendí a crearlo con las tiras de bambú. La mayoría de las personas de mi aldea, sobre todo los jóvenes, no saben hacerlo, por lo que deben recurrir a la ayuda de los ancianos. Nosotros lo hacemos para los vecinos sin pedir nada a cambio”.
Para que el “Ta dieu” tenga su fuerza sobre los fantasmas, es obligatorio leer unas oraciones antes de fijarlo en un lugar adecuado de la casa, y esta tarea solo la pueden cumplir los hechiceros. Al respecto, Tong Van Hia agregó: “Las oraciones hacen temerosos los “Ta dieu” para los malos espíritus. Cada mago tiene su forma de rezar, pero en general insiste en que estos objetos son capaces de intimidar e interceptar a todos los demonios, por eso el “Ta dieu” es comparado con un ojo de dragón, una cuchilla tajante o una arma de fuego, y todos los malos espíritus se alejan aterrados”.
Este rito no es costoso, ni supersticioso, y los Thai lo mantienen abrigando los mejores deseos de bienestar para cada persona, su familia y toda la comunidad.