Un barco de transporte de ayuda en el puerto de Ashdod, en el sur de Israel. (Foto: AFP/VNA) |
Unas horas antes, el Comando Central de Estados Unidos en Oriente Medio (CENTCOM) también confirmó que un carguero con bandera de las Islas Sharshall fue atacado con misiles antibuque en el sur del Mar Rojo. El atentado dañó el costado de babor del barco, pero no causó víctimas ni afectó su navegación.
Mientras tanto, ayer, el ejército israelí continuó lanzando más atentados combinados, utilizando la fuerza aérea, la marina, la artillería y la infantería contra muchos objetivos diferentes en toda Gaza.
El anuncio de anoche de la Autoridad Sanitaria Palestina informaba que los ataques del ejército israelí contra Gaza dejaron al menos 150 muertos y unos 300 heridos, la mayoría de ellos civiles.
Por su parte, en una conferencia de prensa en Tel Aviv, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, afirmó que se seguirán manteniendo operaciones de combate en toda Gaza. “Los ataques de las FDI no cesarán hasta que se haya logrado el objetivo fijado de derrotar a las fuerzas de Hamas y rescatar a todos los rehenes”, aseveró.
El mismo día, en Nueva York, Estados Unidos, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió de nuevo un alto el fuego inmediato para apoyar la entrega de ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza, evitando el riesgo de una escalada de las hostilidades y de la inestabilidad en la región.
Algunas agencias de la ONU, como el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), han pedido al Gobierno israelí que permita el acceso al puerto de Ashdod, en el norte de Gaza, para transportar ayuda humanitaria urgente.