Según los anales históricos locales, la aldea de Phuoc Tich fue fundada en 1470 bajo el imperio de Le Thanh Tong. El legendario río O Lau, con su agua cristalina la abraza como a una isla.
Después de cinco siglos de formación y desarrollo, y de sobrevivir a las encarnizadas guerras y los desastres naturales, este poblado mantiene casi intacta su belleza primitiva, con paisajes románticos, un entorno tranquilo, una arquitectura armoniosa con la naturaleza, y especialmente, sus banianos y embarcaderos y su casa comunal, imágenes muy representativas de las zonas rurales tradicionales de Vietnam. En la entrada del poblado se encuentran un árbol secular datado de hace 700 a 800 años y un templo dedicado a las deidades.
Nguyen Hong Thang, director de la Comisión Administrativa de las Reliquias Arquitectónicas y Artísticas de este antiguo poblado, dijo: “La mayoría de las casas de la aldea dan al río, en vez de mirar al sur o al sureste como en otras localidades del país. Según su creencia, el lugar idóneo para vivir es donde hay agua, como lagos o ríos, símbolos de la prosperidad”.
Más impresionantes son las casas antiguas con sus amplios jardines. Las viviendas ajardinadas de Phuoc Tich no se separan por muros de ladrillo con portones, sino por verdosas cercas hechas de “che tau”, una especie arbustiva. Las filas de esta planta bien podadas que también conducen a las viviendas combinan armoniosamente con los paisajes del lugar.
“La aldea de Phuoc Tich tiene 500 más de años de historia. Gracias a su oficio tradicional de cerámica, alcanzó un buen desarrollo económico. Por eso, los pobladores tenían recursos para construir suntuosas casas de madera. Quedan 20 casas antiguas de madera y 10 santuarios familiares bien cuidados. Tales construcciones llamadas “nha ruong” tienen madera del árbol de yaca como material principal. Hacen la arquitectura típica de Thua Thien-Hue”.
En el interior de estas obras antiguas se puede apreciar un espectacular sistema de vigas y pilares de madera, así como muebles bien trabajados, con relieves tan sofisticados como los de las obras del Palacio Imperial de Hue.
Especialmente, delante de cada vivienda hay colocado un biombo, que sirve para impedir los “vientos malignos” y los malos espíritus. Al pie de esta mampara se pone un tanque para crear un conjunto arquitectónico armonioso y equilibrado, según los principios del feng sui.
Phuoc Tich es la segunda aldea antigua de Vietnam, después de la de Duong Lam, en Hanói, reconocida por el Ministerio de Cultura, Deporte y Turismo como Patrimonio Nacional (en 2009). La administración local presta mucha atención al desarrollo del turismo comunitario asociándolo con la preservación de las reliquias culturales y sociales del poblado y la protección del medio ambiente, al servicio de sus pobladores y para promover aún más los valores de las tradicionales zonas rurales del país.