El arrecife Tu Chinh (o Vanguard Bank en inglés) está situado en la zona económica exclusiva de Vietnam, que se extiende desde el límite exterior del mar territorial hasta una distancia de 200 millas contadas a partir de la línea de base desde la que se mide la anchura de éste. Esta región está bajo soberanía vietnamita a tenor con las normativas de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982.
Acción de China viola flagrantemente las leyes internacionales
La delegación de la segunda región de las Fuerzas Navales de Vietnam visita a los soldados que desempeñan la misión en la plataforma DK1/12, hito fronterizo nacional en la plataforma continental de Vietnam (Foto: VNA) |
De acuerdo con el artículo 56 de dicha legislación, en la zona económica exclusiva un país tiene derechos de soberanía a los fines de exploración y explotación, conservación y administración de los recursos naturales, tanto vivos como no, en las aguas suprayacentes al lecho y del lecho y el subsuelo del mar, y con respecto a otras actividades relativas a la exploración y explotación económica del área, tal como la producción de energía derivada del agua de las corrientes y de los vientos. De esta manera, unidades navales extranjeras interesadas o necesitadas en navegar por la zona marítima de Vietnam tienen que solicitar permiso a este país y acatar la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982.
Sin embargo, China desafía las leyes internacionales al pedir a Vietnam poner fin a la exploración petrolera en los territorios vietnamitas. En este sentido, Noah Zaring, agregado político de la Embajada de Estados Unidos en Hanói, estimó: “Es claro que la acción de China es usar intencionalmente la fuerza para cumplir sus propias metas. China complica la situación y emplea fuerza para hacer obedecer a otros países. En mi opinión, Beijing debe mostrar buena voluntad y respetar las leyes internacionales para no perjudicar la soberanía y la confianza de otras naciones de la región”.
Al exigir a Vietnam poner fin a la exploración petrolera en zona económica exclusiva y convertirla en un área en disputa, China adopta la política “El poder pertenece a los fuertes” con la intención de apropiarse del Mar Oriental. Al respecto, Umnova Irina Anatolyevna, jefa del Departamento de Investigación Constitucional y Jurídica de la Universidad de Justicia, adscrito al Tribunal Supremo de Rusia, evaluó: “La acción de China es completamente contraria a la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 y a los esfuerzos de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) por proteger la paz y solucionar las disputas por medios pacíficos. Un incidente similar no debe repetirse. Vietnam necesita insistir en solucionar las reivindicaciones territoriales por vía pacífica, afirmando el rechazo al uso de fuerza”.
Respetar leyes internacionales y perseverar en la defensa de soberanía nacional
En la actual coyuntura, la defensa de la soberanía nacional sobre los territorios marítimos e insulares de la patria son deberes de los vietnamitas.
El país indochino se ha comunicado con su gigante vecino a través de diferentes canales, y por los canales diplomáticos envió una nota en que rechazaba la infracción de Beijing y lo exhortaba a retirar sus embarcaciones de las aguas de Vietnam. En el actual momento, las fuerzas del orden vietnamitas continúan cumpliendo su misión en los territorios nacionales de conformidad con los derechos soberanos y jurisdiccionales de la nación y las leyes internacionales. En cuanto a los instrumentos jurídicos para solventar el problema, el profesor y doctor Pham Quang Minh, rector de la Universidad de Ciencias Sociales y Humanidades, opinó: “En medio de la globalización y la interdependencia entre los países, una nación, sea grande o pequeña, no puede separarse de esta tendencia internacional. Vietnam no es una excepción, especialmente en la lucha por defender la soberanía de la patria. En este sentido, debe aprovechar con eficiencia la opinión pública y la política exterior para solucionar pacíficamente las disputas. La diplomacia es un instrumento eficaz para que el mundo sepa más sobre Vietnam y para compartir los valores y el apoyo del país a la superación de las diferencias por medios pacíficos sin usar fuerza ni amenazar con hacerlo. Se trata de principios invariables y es hora de aplicar nuestra arma diplomática para defender la soberanía nacional”.
El enfoque correcto de Vietnam ha contribuido a elevar su prestigio y "poder blando" en el mundo para proteger la soberanía sobre los territorios marítimos e insulares del país. Cumplir las leyes internacionales, destacar la transparencia en la solución de las disputas y mantener la buena voluntad en la superación de las diferencias son las medidas adoptadas por Hanói, las cuales han sido respaldadas por la comunidad internacional porque contribuyen a mantener la paz y la estabilidad a favor del desarrollo regional y mundial.