La zona donde está instalada la plataforma soberana DK1 de Vietnam, que incluye el arrecife Tu Chinh se sitúa en su zona económica exclusiva y plataforma continental del sur |
Según regulaciones internacionales, la exploración geológica realizada por Haiyang Dizhi 8 violó casi todos los artículos de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar) relativos a los deberes y derechos de las partes involucradas.
Si la actividad se dirige a estudiar la reserva petrolera en el fondo de la zona económica exclusiva y la plataforma continental de Vietnam, eso significa una violación de los derechos soberanos de la nación indochina. Y si se trata de una exploración geológica al servicio de las investigaciones científicas aunque para fines pacíficos, viola los derechos jurisdiccionales de este país en su propia zona económica exclusiva.
China no tiene ninguna zona legal contigua con el arrecife Tu Chinh de Vietnam
Ante todo, la zona donde está instalada la plataforma soberana DK1 de Vietnam, que incluye el arrecife Tu Chinh (o Vanguard Bank en inglés), se sitúa en su zona económica exclusiva de 200 millas desde la línea de base y en su plataforma continental del sur. Determinada al tenor de la Convemar, el área no sufre disputa con ningún otro país, ni con China.
Que el gigante asiático dibujara la línea de demarcación en forma de lengua de vaca en el Mar del Este (o mar de China Meridional), la cual “se come” el 60% de la zona marítima de Vietnam, es un hecho totalmente absurdo, según el derecho internacional.
El fallo de la Corte Permanente de Arbitraje (CPA) en el pleito de Filipinas contra China, un documento jurídico que instruye y explica la Convemar de 1982, refutó sin rodeos la reclamación de Beijing relativa a la referida línea de demarcación. Aunque China se excluyó del pleito y rechazó el veredicto de la CPA, el documento sigue válido. El tribunal afirmó que esa demarcación carece de fundamentos jurídicos, por lo que China no puede reclamar el derecho de la explotación de recursos naturales dentro de sus límites. Esto también significa que el gigante asiático no tiene ningún territorio en disputa con Vietnam en la zona alrededor de la estructura DK1, incluido el arrecife de Tu Chinh.
La actividad violatoria de embarcaciones chinas en la zona rica en recursos energéticos sirve ante todo para impedir la exploración y explotación de petróleo por parte de Vietnam. Son inaceptables e irracionales la actitud coercitiva y las amenazas de Beijing hacia Vietnam y los socios extranjeros que operan en la zona. Esta acción forma parte de la estrategia de Beijing de imponer la ilegítima línea de la “lengua de vaca” en el Mar Oriental para obstaculizar las operaciones de cualquier asociado interesado en promover la cooperación petrolera con Vietnam y adueñarse de esta zona marítima y sus abundantes recursos hallados dentro de esa demarcación, que ocupa el 80% de la superficie total del Mar del Este.
Vietnam persiste en defender sus derechos soberanos y jurisdiccionales
El pasado 19 de julio, Vietnam alzó su voz para pedir a China retirar todos sus barcos de las aguas del país y otorgó notas diplomáticas de protesta exigiendo el fin inmediato de las violaciones, en bien de las relaciones de ambas naciones y por la paz y la estabilidad en la región. Esta fue la segunda vez que Vietnam demostró su clara postura al respecto. Cuatro días antes, la portavoz de la Cancillería vietnamita, Le Thi Thu Hang, reafirmó los derechos soberanos y jurisdiccionales de su país sobre las áreas en el Mar Oriental determinadas en concordancia con la Convemar de 1982 de la que son signatarios Vietnam y demás países ribereños. Señaló que todas las acciones de otro país en la zona deben respetar lo establecido en ese documento y las leyes vietnamitas, dijo.
En los últimos tiempos, Vietnam ha desplegado de modo coordinado medidas pacíficas para resolver las disputas en el Mar Oriental y pedir el respeto a su soberanía marítima, derechos e intereses legítimos. Las fuerzas del orden en el mar de este país siguen cumpliendo sus tareas con apego a las leyes internacionales. El pueblo vietnamita y muchos otros en el mundo han protestado enérgicamente las acciones violatorias de China y han exteriorizado el apoyo a la defensa de la nación indochina en beneficio para la paz, la seguridad y la estabilidad en la región y el resto del mundo.