El restaurado santuario central de la pagoda Pothi Phdok. (Foto: VOV) |
La pagoda Pothi Phdok se sitúa en la aldea de Kinh Giua I, del distrito de Ke Sach. A pesar de estar en una zona rural y remota de la provincia de Soc Trang, recibió una financiación considerable de la administración local para su restauración. El aspecto nuevo y radiante que tiene ahora este templo budista va en consonancia con la renovada fisonomía de las aldeas Jemer.
Según Son Sang, abad de la pagoda, en las pasadas resistencias del pueblo contra las tropas invasoras extranjeras, especialmente de 1952 a 1975, este lugar fue una base revolucionaria fiable. El santuario dio amparo a muchos cuadros y combatientes revolucionarios, proveyendo incluso comida y vestimenta para que tuvieran fuerza y continuaran su camino en la lucha revolucionaria por la liberación y reunificación nacional. El abad añadió: “El bonzo superior Cao Cuong, que administró esta pagoda en aquel entonces, fue muy destacado en la lucha contra las fuerzas estadounidenses para la liberación nacional. Además de sumarse a la resistencia antiyanqui, apoyó a muchas personas que encontraron un refugio seguro en la pagoda. Incluso les dio comida y otras ayudas esenciales”.
La pagoda Pothi Phdok fue destruida gravemente por las bombas enemigas durante la guerra. Por sus aportes y valores históricos, el santuario fue reconocido en 2016 como Patrimonio Cultural a nivel provincial, y su restauración fue realizada con los recursos del gobierno de Soc Trang. Al respecto, el abad Son Sang, dijo: “El santuario central de la pagoda fue remodelado gracias al apoyo financiero de la provincia. Los monjes y creyentes nos sentimos muy felices y agradecidos”.
La entrada de la pagoda O Chumaram Pkek Chek. (Foto: VOV) |
Al igual que Pothi Phdok, la pagoda O Chumaram Pkek Chek, en la comuna de Vinh Quoi, del pueblo de Nga Nam, también realizó aportes significativos a la resistencia contra los colonialistas franceses y los imperialistas estadounidenses al ser un lugar de refugio de muchos revolucionarios. Materializando la política de salvaguardar y promocionar los valores tradicionales de la nación y los sitios con contribuciones históricas a la revolución, Soc Trang destinó un presupuesto de mil millones de dongs (más de 43 mil dólares) a la restauración del santuario principal de la pagoda gravemente afectada por la guerra.
El abad Son Phuoc Loi, dejó saber: “El bonzo superior que dirigió nuestra pagoda participó en la causa revolucionaria, y su sobrino también. Él protegió y cuidó a muchos combatientes revolucionarios. Por esta razón, la pagoda fue blanco de las bombas del ejército estadounidense. Fue devastada por la guerra y fue deteriorándose. Luego de la liberación y reunificación nacional, no pudimos restaurarla por falta de recursos. Pero recientemente gracias a la atención y el apoyo del Partido y el Gobierno el santuario principal fue remodelado. Todos estamos muy contentos”.
La restauración de las pagodas de los Jemeres con grandes méritos revolucionarios en Soc Trang contribuye a preservar los valores culturales tradicionales de esta minoría étnica. Asimismo, despierta el orgullo y el amor a la patria en cada persona y solidifica la unidad nacional entre las diversas etnias que habitan esta tierra.
Siguiendo la tradición de las generaciones anteriores, los dignatarios, monjes y creyentes Jemer continúan aportando a la construcción y el desarrollo de su localidad.