Los Cham realizan ritos religiosos en el Ramadán. (Foto: baoangiang.com.vn) |
Durante un mes (que suele coincidir con el plazo de mayo a junio en el calendario gregoriano), el Ramadán ayuda a los Cham de ambos sexos a partir de cinco años a hacer un balance personal sobre lo que ha hecho desde el inicio del año. El objetivo de esta tradición es superar las dificultades existentes y rectificar los errores que han cometido.
Para eso se privan de comer, beber y fumar. Además, los Cham dejan de matar animales y no se pelean con otras personas. Incluso dejan de darse baños antojadizos. Y evidentemente, tampoco hay actividades de diversión, ni cantos o bailes en la comunidad.
En vísperas del Ramadán, los aldeanos se reúnen para debatir sobre los preparativos, entre ellos la compra y repartición de pasteles, frutas y carne de res para festejar juntos en una casa espaciosa o en la mezquita cuando llega el final del ayuno. También limpian y arreglan sus casas, y decoran los caminos para saludar la festividad. Hasta los niños más pequeños se suman con gran entusiasmo a esta labor.
En referencia a las prácticas de ayuno, Mohamet, residente en Vung Xoai, una aldea que pertenece a la comuna de Chau Phong, en el pueblo de Tam Chay, dijo: “El ayuno se realiza durante las horas del sol, y es después del atardecer cuando se puede comer y beber. Lo practicamos durante 30 días consecutivos. Para la ocasión, las familias preparan buenas comidas y lucen lindos trajes. En la última jornada del Ramadán, luego de asistir a la oración en la mezquita, visitamos a nuestros abuelos y padres, y nos reunimos con los vecinos y amigos”.
No por ser un mes de ayuno significa que hay menos vida en la comunidad. Al contrario, se realizan muchas actividades durante el Ramadán. Los creyentes musulmanes dedican tiempo a orar en su casa y a las actividades caritativas. Además, después del atardecer, los aldeanos suelen reunirse y disfrutar juntos del festín nocturno. De acuerdo con Chale, jefe de la aldea de Vung Xoai, la cena está formada por varios platos ligeros para ayudar a todos a equilibrar su cuerpo.
“Los platos principales de la cena incluyen un curri y un ca pua. La fiesta de los Cham en esta ocasión es denominada ‘Tet sa chai’, es decir, ayunamos y a la vez festejamos. Celebramos el mes, yendo a la mezquita para orar y reuniéndonos con los vecinos para comer juntos”, dijo.
Teniendo en cuenta la importancia del Ramadán para los Cham, las autoridades de la provincia de An Giang prestan mucha atención a los aldeanos. Huynh Thanh Duy, funcionario de la Sección de Cultura de la comuna de Chau Phong, precisó: “El Ramadán es la fiesta tradicional de los Cham. Las administraciones locales protegen mucho la vida cultural y espiritual de esta población. A través de los comités representantes le transmiten felicitaciones y deseos de que tengan un festejo seguro y feliz”.
Tres días después del Ramadán se realizan actividades de gran significado. Las personas que viajan y trabajan lejos de su casa regresan a sus hogares para la reunión familiar y los encuentros comunitarios, siendo esto una cita tradicional para todos los Cham que practican el Islam. Para ellos, se trata de unos días más felices, de tanto significado como el Tet (Fiesta del Año Nuevo lunar) para la etnia mayoritaria Kinh, por lo que no escatiman esfuerzos en elaborar exclusividades que ofrecer a sus visitantes en la importante ocasión.