Celebrada del 15 al 17 de junio en la localidad de Kananaskis, provincia de Alberta, la Cumbre del G7 finalizó sin la tradicional declaración conjunta, limitándose a la publicación de varios comunicados sobre temas específicos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, abandona anticipadamente la cumbre del G7 para monitorear las tensiones en Medio Oriente. (Foto: REUTERS/Kevin Lamarque) |
Crecen las divisiones con Washington
El ataque preventivo de Israel contra Irán el pasado 13 de junio, que desató una escalada bélica justo antes del inicio de la Cumbre, desvió la atención de las prioridades establecidas por el país anfitrión.
Como consecuencia, el presidente estadounidense Donald Trump regresó anticipadamente a Washington para abordar la crisis, dejando truncadas varias reuniones clave previstas con otros líderes.
El conflicto entre Tel Aviv y Teherán también acentuó las diferencias entre Estados Unidos y sus aliados europeos. Mientras Trump defiende una línea dura respecto al programa nuclear iraní, países como Francia, Alemania e Italia apuestan por la vía diplomática.
Las tensiones aumentaron tras las declaraciones del presidente francés Emmanuel Macron, quien informó que Washington habría propuesto un alto el fuego, y que Europa estaría dispuesta a retomar el diálogo con Teherán en el marco del acuerdo P5+1 firmado en 2015. Trump criticó públicamente a Macron, agravando el distanciamiento.
En otro tema central, los países europeos y Canadá buscaban un endurecimiento de las sanciones contra Rusia por el conflicto en Ucrania, pero Trump se mostró reticente. Incluso cuestionó la exclusión de Rusia del G8 en 2014, calificándola como un error estratégico que contribuyó al deterioro de las relaciones entre Moscú y Occidente.
El presidente estadounidense también declinó reunirse con el mandatario ucraniano, Volodímir Zelensky, frustrando los esfuerzos de Kiev por obtener un respaldo firme de Washington. Como resultado, no se logró una postura común sobre el conflicto en Ucrania. Aunque varios miembros del G7 anunciaron nuevas sanciones contra Moscú y ayudas para Kiev, Estados Unidos comunicó que no se sumará a estas medidas. El inquilino de la Casa Blanca justificó al respecto: “Estoy a la espera de ver si es posible un acuerdo con Rusia. No olvidemos que las sanciones son costosas y le cuestan a Estados Unidos miles de millones de dólares. No son medidas simples ni unilaterales”.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en una reunión durante la Cumbre de Líderes del G7 en Kananaskis, Canadá, el 17 de junio de 2025. (Foto: REUTERS/Amber Bracken) |
La retirada anticipada de Trump también impidió que se llevaran a cabo conversaciones clave con la Unión Europea (UE) y Japón sobre política arancelaria y comercio. El presidente estadounidense sólo tuvo tiempo de anunciar, junto al primer ministro británico, Keir Starmer, un acuerdo comercial bilateral ya pactado. En su camino de regreso, Trump lanzó incluso un ultimátum a la UE en materia de aranceles.
Avances parciales y nuevas temáticas
A pesar de no lograr una declaración conjunta, la Cumbre en Canadá logró consensuar algunos acuerdos en áreas específicas. Entre ellos destaca especialmente el comunicado conjunto sobre inteligencia artificial (IA), considerado el más completo emitido por el G7 hasta la fecha.
En el documento, los líderes se comprometen a un enfoque centrado en el ser humano, orientado a utilizar la tecnología para fomentar la prosperidad, fortalecer la seguridad social y enfrentar los grandes desafíos globales.
Asimismo, se adoptó una visión común sobre tecnologías cuánticas emergentes, con el objetivo de promover la inversión pública y privada en este sector estratégico. Especialmente, y por primera vez, se abordaron temas como la migración y los minerales críticos, incorporados a la agenda principal del G7. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, subrayó: “Hemos incorporado a las discusiones del G7 temas clave como la migración, tratada por primera vez a este nivel, la inteligencia artificial, y un asunto estratégico como los minerales esenciales”.
En materia ambiental, se firmó la Carta de Kananaskis sobre incendios forestales, un acuerdo que establece medidas para la prevención, cooperación científica y reconstrucción tras incendios. Este compromiso fue respaldado por los países del G7 y cinco naciones invitadas: Australia, India, México, Corea del Sur y Sudáfrica.
El primer ministro canadiense, Mark Carney (i) y su par indio, Narendra Modi, en la Cumbre de Líderes del G7 en Kananaskis, Canadá, el 17 de junio de 2025. (Foto: REUTERS/Amber Bracken) |
Por otra parte, los líderes del bloque también aprobaron una declaración conjunta para combatir la trata de personas transfronteriza, incluyendo la posible imposición de sanciones a grupos delictivos involucrados en el tráfico de migrantes desde países de origen.
Un hecho bilateral destacado en la Cumbre fue el deshielo diplomático entre Canadá e India, tras un período de tensiones iniciado en 2023. La participación del primer ministro indio, Narendra Modi, y su reunión con su homólogo canadiense, Mark Carney, sentaron las bases para normalizar las relaciones entre ambos países.