Una de las estrategias clave ha sido fomentar la creación de cooperativas agrícolas, orientadas hacia una producción moderna, especializada, a gran escala y con proyección de mercado. A ello se suma la intensificación del uso de ciencia y tecnología avanzada, lo que ha permitido un salto cualitativo en la productividad.
Luong Van Quynh, director de la Cooperativa de Frutales Muong Sang, recordó: “Nuestra cooperativa se estableció en 2017 con 14 miembros, y ahora contamos con 30. Antes, los agricultores trabajaban de forma dispersa y a pequeña escala, sin coordinación técnica ni acceso conjunto a los mercados. Con la cooperativa, hemos logrado vincularnos, aprender juntos, mejorar el cuidado de los cultivos y ampliar la comercialización”.
 Luong Van Quynh (derecha), director de la Cooperativa de Frutales Muong Sang, cuida el huerto de ciruelos. (Foto: Thu Thuy/VOV-Tay Bac) |
Hasta junio de 2025, Son La contaba con más de 900 cooperativas, de las que cerca de 650, más del 70 % eran agrícolas, además de seis uniones de cooperativas del sector. Muchas han evolucionado del modelo tradicional al cooperativismo moderno, con producción en cadena y estrecha vinculación entre empresas, agricultores y mercados.
Dinh Cao Khue, presidente del Consejo de Administración de la Compañía de Alimentos de Exportación Dong Giao, destacó: “Establecemos vínculos muy diversos, especialmente con cooperativas agrícolas y de nuevos modelos. Sobre esta base, definimos áreas clave de producción, asegurando beneficios equilibrados para agricultores, cooperativas y empresas”.
En la actualidad, la mayoría de las cooperativas agrícolas de Son La aplican estándares VietGAP y GlobalGAP, cuentan con códigos de zonas de cultivo y desarrollan prácticas como la plantación de nuevas variedades, el injerto de frutales de alta calidad o la experimentación en invernaderos y mallas.
Los cultivos de ciruela, aguacate, caqui crujiente y cítricos han registrado altos rendimientos e ingresos. La provincia dispone de más de 20.000 hectáreas de frutales cultivados bajo procesos seguros, y numerosas áreas poseen códigos de exportación hacia mercados exigentes como China, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur.
 Con una producción anual de alrededor de 380.000 toneladas, Son La es actualmente el mayor granero de fruta de la región norte, ocupando el segundo lugar en el país. (Foto: Thu Thuy/VOV-Tay Bac) |
Tran Van Ngoc, director de la Cooperativa de Servicios Agrícolas Hung Loc, en la comuna de Chieng Khuong, una de las principales zonas productoras de longan, subrayó: “La provincia ha formado a las cooperativas en técnicas para inducir la floración, y estas transmiten el conocimiento a los agricultores. Así, la marca de longan local ha alcanzado una calidad sobresaliente. Además, las autoridades han apoyado la modernización del procesamiento, garantizando productos no tóxicos, lo que ha permitido que el longan seco se exporte con gran aceptación a numerosos países”.
En los últimos años, Son La se ha consolidado como el mayor productor de frutales del norte de Vietnam y el segundo del país, siendo considerado un “fenómeno de la economía agrícola” nacional.
Nguyen Thanh Cong, vicepresidente del Comité Popular provincial, precisó que, sobre la base de los logros alcanzados, la provincia continuará reestructurando sectores y subsectores, renovando el modelo de crecimiento y elevando el valor del sector agroforestal y pesquero en 2025 a más de 3,38 millones de dólares, un 4,9 % más que en 2024.
“En 2025, Son La ha fijado 28 objetivos socioeconómicos, con metas específicas para la agricultura: aumentar de 308 a 350 las cadenas de producción segura; de 213 a 300 los códigos de zonas de cultivo; de 204 a unos 250 los productos OCOP; pasar de 9 a 15 zonas agrícolas de alta tecnología; y que, de las 84.000 hectáreas de frutales, al menos el 60 % se cultive en grandes explotaciones bajo estándares limpios. Asimismo, concluiremos el plan para convertir a Son La en el centro de procesamiento agrícola de la región”, enfatizó.
En adelante, la provincia apostará por una agricultura de alta tecnología, limpia y orgánica, vinculada a la transformación digital en la producción, el procesamiento y la comercialización. Reforzará la construcción y promoción de la marca agrícola local, ampliará mercados, impulsará el comercio electrónico y se orientará a exportaciones sostenibles.
De forma paralela, se mantendrán políticas de apoyo en financiación, ciencia y tecnología y uso de la tierra, incentivando a empresas, cooperativas y agricultores a invertir en el desarrollo agrícola, con el objetivo de que el Producto Interno Bruto Regional en 2025 alcance el 8 % previsto.