(VOVworld) - El “Ca tru” o “Hát a dao” es un canto popular característico de Vietnam. En 2009, la UNESCO lo reconoció como patrimonio cultural intangible de la humanidad de protección urgente. Este es un honor para Vietnam, al mismo tiempo que plantea la tarea de preservar y desarrollar sus valores tradicionales en la vida moderna.
El “Ca tru” es un arte ceremonial de carácter académico muy peculiar que se desarrolla en Vietnam desde el siglo XV hasta la fecha, con amplias influencias en la vida cultural y social de los habitantes en el delta del río Rojo. A través de numerosos altibajos históricos mantiene su vitalidad perdurable y valores originales en la cultura vietnamita en general, dejando huellas profundas en el corazón de auditorios nacionales y extranjeros. El primero de octubre de 2009 el canto ritual vietnamita fue honrado por la UNESCO como patrimonio cultural intangible de la humanidad que debe ser protegido urgentemente. Este honor requiere hacer más esfuerzos para mantenerlo y difundirlo. Esta es una tarea de toda la sociedad, sobre todo la joven generación. El profesor, doctor To Ngoc Thanh, investigador de literatura y arte populares de Vietnam, consideró: “En este siglo el “Ca tru” está a punto de extinción. En comparación con otras artes tradicionales, su existencia es muy frágil, ya que ha perdido su posición en la vida social. Por ello, devolverle su posición no es fácil, sobre todo esta época de Karaoke y música MTV. Si se quiere recuperarlo, ante todo se debe buscar a los viejos artistas. Por eso, pretendemos hacerlo en las personas de edad avanzada. Ante todo se necesita conquistar un público y después con su atractivo expandirlo a los jóvenes.”
El Festival nacional de "Ca tru" en 2009 cuenta con la participación
de varias generaciones de artistas y aficionados
El mantenimiento y desarrollo del “Ca tru” hasta hoy se debieron a la herencia y los grandes aportes de muchas generaciones. Según estadísticas, actualmente en el país hay 63 seminarios y clubes del “Ca tru” con más de 700 integrantes en l5 provincias y ciudades. Junto con la creación y reforzamiento de esas sociedades, la formación de jóvenes intérpretes llama la atención de numerosas personas. Hanoi es una ciudad que tiene muchos seminarios y centros populares que realizan actividades eficaces. Regocija comprobar que en las actuaciones aparecen cada día más jóvenes artistas. Nguyen Kieu Anh de l7 años de edad de la séptima generación de una familia en el seminario de Thái Ha se vincula desde hace tiempo al “Ca tru”. Cuando se presenta el público cree que con su pasión y fervor, la joven generación continuará enriqueciendo ese antiguo canto. “En la sociedad de hoy, nosotros los jóvenes nos apasionamos por distintas artes. Sin embargo, siete generaciones de mi familia han participado del canto ceremonial. Nací en ese ambiente. Por ello, la singularidad de la tonada popular y todo lo que se relaciona me fascinan y le he dedicado gran amor”.
El Club de "Ca Tru" Hanoi realizan cada semana actuaciones
gratuitas al servicio de los amantes del canto popular
Las presentaciones frecuentes de los seminarios y clubes de “Ca tru” de Hanoi no solo contribuyen a elevar conocimientos del auditorio sobre este género, sino que atrae a muchas personas, sobre todo los jóvenes, reafirmando su vigencia en la sociedad moderna. Al presenciar por casualidad un programa del “Ca tru” en los barrios antiguos de Hanoi, la estudiante Pham Hong Phuong, del Instituto de Finanzas valoró más este patrimonio cultural intangible de la humanidad. Ella está consciente de que la joven generación debe contribuir a defenderlo. Phuong y sus amigos constituyeron una brigada de voluntarios vinculada con el Club de “Ca tru” de Hanoi. “El objetivo de nuestro grupo consiste en preservar el “Ca tru”, porque éste fue reconocido por la UNESCO como patrimonio cultural intangible de la humanidad. Por ello, la preservación de la entonación tradicional es una tarea de todos los vietnamitas, especialmente los jóvenes”.
Actualmente el Club de voluntarios de “Ca tru” de Hanoi tiene unos 50 miembros y la mayoría de ellos son estudiantes de las universidades en la ciudad. Su labor consiste en vender entradas, introducir a los visitantes extranjeros en el canto ceremonial y conducir las representaciones. Las actividades de los jóvenes amantes del “Ca tru” de Hanoi están contribuyendo a la protección del arte original en la integración del país./.