El distrito de Phung Hiep se sitúa en lo más hondo de la provincia de Hau Giang, originalmente una zona baja del Delta del río Mekong, por lo que supuestamente tiene la mayor cantidad de peces. Han pasado más de dos meses desde el inicio de la temporada de aguas crecidas del presente año, los campos locales están ya anegados. Es también hora de que los pobladores se suban ansiosos a sus botes para cazar las “riquezas” regaladas por la Madre Naturaleza, especialmente mariscos, para proveer al “mercado fantasma en cuclillas”.
Sobre la medianoche, cuando el sosiego colma todo el pueblo rural y la gente está dormida, a la orilla del río local empiezan a verse comerciantes esperando comprar productos recién recolectados por los lugareños desde canales y tramos fluviales. Los botes de todos tipos concurren al muelle y muy pronto se forma un mercado con sonidos de charla y regateo. El número promedio de clientes es de 15 a 20 y en momentos pico llega a 30 y 40. Atienden de una decena hasta más de 200 vendedores.
La gente comercializa en la pescadería productos que capturan en el rio. |
Dang Van Giang, oriundo de la comuna local de Hoa An, dijo: “Este año el nivel de agua aumenta más que en los anteriores. Nuestra red a veces está cargada de peces, a veces atrapa solo unos cuantos, en su mayoría percas trepadoras y de las familias de gouramis o Nandidae. Suman de entre 3 o 4 kilogramos, si me toca la suerte como hoy, obtengo hasta 6 o 7 kilogramos de peces de Channidae. Hoy he ganado más de 30 dólares”.
En una zona estimada de 300 metros a lo largo de la ribera, sin instalaciones ni alumbrado, cada comerciante elige un sitio para colocar su taburete, se sienta con los vendedores y negocia la compra bajo la luz de linternas de mano o de cabeza. Los productos más buscados incluyen los acuáticos como pez cabeza de serpiente, pez gato, perca trepadora, anguila y gamba, y verduras de la temporada. Una vez concertado el precio, los productos se transportan rápidamente en moto para revender en los mercados en Can Tho, Vinh Long, Soc Trang y otras ciudades y provincias.
“Me levanto a medianoche para ir al mercado. Compro todo lo que venden. Como es de temporada los precios son baratos. A las tres de la madrugada voy a Can Tho y pongo los productos a la venta, vuelvo a casa en cuanto se agoten”, compartió la comerciante Le Thi Loan sobre su rutina.
Peces capturadas por los mismos comerciantes. |
La pescadería de Hoa My suministra al mercado normalmente entre 3 y 4 toneladas de productos y, en los momentos pico, de 6 a 7 toneladas. La habitante Lam Thi Chien, con casi 30 años de experiencia como mayorista en este bazar, indicó: “Es poca la producción por estos días. Sólo recolecto unos 50 o 60 kilogramos de peces y anguilas. El precio para un kilogramo de peces grandes ha bajado de 110 mil dongs vietnamitas (4,5 dólares ) a 100 mil (4 dólares)”.
Luego de vender sus botines a los comerciantes, los pobladores se juntan para comer, tomar un café a orilla del río y charlar acerca de la cosecha y la pesca. Basta tal intervalo de descanso antes de que se apresuren a encender el motor de sus lanchas e inician un nuevo día de trabajo con el deseo de recoger redes cargadas, para mejorar cada vez más su vida.