Al intervenir en el coloquio, el embajador Dang Dinh Quy, jefe de la misión vietnamita ante la ONU, resaltó la necesidad de compartir la responsabilidad de la comunidad en la protección ambiental.
Destacó que los conflictos armados contaminan y perjudican el entorno y así, la vida y la salud de los pobladores.
Dijo que, en el período posterior a esos enfrentamientos, la restauración del ambiente natural puede respaldar la reconstrucción y coadyuvar a los residentes a estabilizar su vida más pronto, así como contribuir a la paz sostenible.
Tras recordar las consecuencias graves del Agente Naranja/Dioxina en Vietnam con más de tres millones de víctimas en la actualidad y miles de hectáreas de tierras contaminadas por esta sustancia tóxica, el diplomático dijo que la superación de esos daños necesita muchos recursos y tiempo.
También agradeció la asistencia de los países miembros y organismos de la ONU y la comunidad internacional en las labores de descontaminación del Agente Naranja/Dioxina y el respaldo a sus víctimas en Vietnam, enfatizó.