La nueva legislación trae más incentivos a las empresas de alta tecnología, los proyectos de emprendimiento innovador, los centros de investigación y desarrollo, la creación de nuevos materiales, nuevas energías y productos cibernéticos, incluidos software y contenidos digitales.
En cuanto a los procedimientos de inversión con la participación de grupos de extranjeros, el Comité Permanente del Parlamento reiteró la necesidad de armonizar la demanda de desarrollo socioeconómico y la defensa nacional, reforzando las regulaciones sobre el usufructo de tierra.