Entre los pasajeros se incluyen niños, ancianos, personas con enfermedades graves, mujeres embarazadas, empleados cuyos contratos habían vencido, estudiantes que habían completado sus estudios y otros casos en situaciones complejas.
Inmediatamente tras su aterrizaje en el Aeropuerto Internacional de Can Tho, todos los pasajeros junto con la tripulación, fueron trasladados a instalaciones de cuarentena centralizada después de ser sometidos a los correspondientes chequeos médicos.