En ese sentido, los diputados tendrán una base para decidir sobre el Brexit antes de realizar la votación el próximo 11 de diciembre.
Se trata de un paso sorpresivo del Parlamento británico en el contexto de que la primera ministra, Theresa May intenta convencer a los legisladores aprobar su propuesta sobre el Brexit en una reunión de 5 días antes de la votación.