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Según esta entidad, Bulgaria es el único país que cumple todos los criterios menos uno y cuya legislación nacional puede considerarse compatible con las normas de la Unión Económica y Monetaria.
Tal evaluación de la CE se basa en criterios específicos como la estabilidad de precios, las finanzas públicas, los tipos de cambio y los tipos de interés a largo plazo.
Según la última encuesta realizada en estos seis países, menos del 50% de los habitantes de Bulgaria (49%), la República Checa (49%) y Polonia (47%) quieren apoyar la introducción del euro en sus territorios en el futuro, mientras que la mayoría de los ciudadanos de Rumanía (77%), Hungría (76%) y Suecia (55%) apoyan la adhesión a la zona del euro.