El anuncio de las agencias de la ONU alertó que la emergencia en Sudán podría extenderse a los países vecinos si continúan los combates.
Niños refugiados en Al-Eligat, Sudán. (Foto: AFP/VNA)
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En una declaración a la prensa en Ginebra (Suiza), el portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Christian Lindmeier, destacó que si los combates no cesan y el acceso a la ayuda humanitaria continúa obstaculizado, la crisis en Sudán empeorará y podría afectar a toda la región.
Los conflictos provocarán oleadas de migración, propagación de enfermedades e inseguridad alimentaria.
Las estadísticas muestran que el conflicto en Sudán entre el ejército del país y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) se ha cobrado miles de vidas y ha obligado a más de 8,5 millones de personas a huir de sus hogares, de las cuales casi 1,8 millones tuvieron que huir a países vecinos.
La OMS advierte que el sistema de salud en Sudán está colapsando debido a una grave falta de personal médico, así como de medicamentos, vacunas, equipos y suministros médicos.