La reunión de los ministros de Finanzas y gobernadores de Bancos Centrales del G20 en Fukuoka, Japón (Foto: AFP/VNA)

El documento pasa por alto la necesidad de resolver la guerra comercial entre Washington y China, con lo que desconoce su impacto negativo para el crecimiento económico mundial.

En lugar de esto, reconoce que el aumento de las tensiones geopolíticas y comerciales es un desafío para la economía global, y los países se comprometieron a continuar abordando los riesgos, así como a tener más acciones para reducir las amenazas al comercio global.

Tampoco incluye ningún compromiso del G20 a actuar contra el proteccionismo.

Se cree que las omisiones se produjeron a causa de la presión desde Estados Unidos. Es probable que Washington quiera eludir cualquier barrera que se oponga a su política de aumentar los impuestos sobre los productos chinos.

Si algo positivo tuvo la reunión de los ministros de Finanzas del G-20, fue que, pese a sus diferentes puntos de vista, se sentaron a debatir temas candentes que amenazan el crecimiento económico global.