En una conferencia en Seúl, Moon Chung-in afirmó que muchos ciudadanos estadounidenses desean realizar actividades humanitarias en la República Popular Democrática de Corea, pero no pueden debido a las restricciones del Gobierno. “Eliminar esas restricciones podría enviar un mensaje positivo a Corea del Norte”, aseveró.
Esas declaraciones se emitieron en un contexto en que las conversaciones nucleares entre Pyongyang y Washington se han estancado. El primero exigió el alivio de las sanciones, mientras el segundo requiere más medidas de desnuclearización por parte de Corea del Norte.