Soldados israelíes en su patrulla frente a una comisaría de policía destruida por un cohete de Hamas en Sderot, al sur de Israel, el 8 de octubre. (Foto: Reuters) |
Entre los heridos hay decenas de casos críticos y el número de víctimas puede continuar aumentando, ya que muchas personas siguen desaparecidas, mientras persisten los combates con hombres armados que se infiltran desde la Franja de Gaza.
En una declaración emitida el domingo, un representante del ejército israelí afirmó que la guerra con Hamás será larga y los días venideros serán muy difíciles.
Anteriormente, el gobierno de Tel Aviv declaró oficialmente que el país se encontraba en estado de guerra y afirmó que abrirá más operaciones militares en Gaza en los próximos días.
Esta es la primera vez tras medio siglo, después del conflicto de 1973 con Egipto, que Israel declara el estado de guerra en todo su territorio.
Mientras tanto, en la Franja de Gaza la parte palestina confirmó otras decenas de personas fallecidas y heridas en los últimos ataques aéreos realizados desde la tarde hasta la noche por el ejército israelí en esa tierra. Previamente anunció que el número de víctimas en bombardeos consecutivos realizados desde la mañana del 7 de octubre por parte del ejército israelí sobre Gaza fue de más de 400 muertos y 2300 heridos.
La Autoridad Palestina ha presentado un memorando que pide a la Liga Árabe (LA) que celebre una reunión de emergencia a nivel de Ministros de Asuntos Exteriores.
El mismo día, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados en Gaza informó que los días 7 y 8 de octubre 73 000 palestinos se refugiaron en las escuelas de la agencia en Gaza. Se prevé que esta cifra continuará aumentando y la capacidad de recepción de dichos centros educativos será sobrecargada si continúan los ataques aéreos israelíes.
En cuanto a la respuesta internacional, el presidente estadounidense, Joe Biden, anunció el domingo que proporcionará ayuda de emergencia adicional a Tel Aviv para hacer frente al asalto sin precedentes de Hamás, pero no reveló más detalles.
Mientras tanto, numerosos países de la región siguen pidiendo a todas las partes que actúen con moderación y eviten acciones que intensifiquen las hostilidades. Algunas naciones como Egipto, Arabia Saudita y Turquía afirmaron su voluntad de mediar para poner fin a los combates y restablecer la paz en la región.