Cìudadanos hacen cola para comprar productos en el período de la economía planificada en Vietnam en los años de 1970 y 1980. (Foto de archivo: quanlynhanuoc.vn)
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“La política no puede promulgarse simplemente desde un nivel superior, sino que debe contar con la participación de los ciudadanos, tanto en el planteamiento de esa política como en la supervisión de su implementación, a fin de comprender sus opiniones y aspiraciones”.
Este fue el criterio del doctor Nguyen Si Dung, ex vicejefe de la Oficina del Parlamento, al abordar la gobernanza nacional. Según este oficial, si la administración estatal es un concepto restringido sobre cómo el papel del Estado impacta en los sujetos y sectores a su cargo, la gobernanza nacional es una conceptuación mucho más amplia. Si Dung continuó: “Elevar la gobernanza nacional significa el respeto a los principios. Antes que nada, es necesario garantizar el derecho. Segundo, hay que manejar los asuntos estatales con transparencia. Tercero, hace falta asegurar que los funcionarios rindan cuentas de su responsabilidad y cuarto, hay que contar con la participación ciudadana. Ahora, para movilizar la participación de las masas, es importante basarse en las estipulaciones, las normas y los documentos jurídicos. Si los ciudadanos se sumasen a la supervisión, sería a través del Frente de la Patria”.
La realidad demuestra que en el mundo, mientras numerosos países han experimentado espectaculares pasos de avance en los últimos decenios, como Japón, Corea del Sur y Singapur, otros siempre se encuentran en la pobreza. Pues, la diferencia radica en la capacidad de gobernanza nacional de uno mismo.
La economía de mercado con orientación socialista se dirige al desarrollo armonioso entre lo económico y lo social. (Fuente: quanlynhanuoc.vn) |
De acuerdo con la profesora adjunta y doctora Bui Thi An, jefa del Instituto de Medio Ambiente y Desarrollo, en la ejecución de la gobernanza nacional, las instituciones juegan un rol importante, al igual que la capacidad de los funcionarios.
“La gobernanza nacional se refleja en todos los ámbitos y el personal de diferentes niveles, desde el local hasta el central. Es importante formar y designar a las personas merecidas, con evaluaciones correctas sobre su desempeño para ver si cumplen o no con sus tareas y funciones”, dijo.
A su vez, el miembro permanente del Comité de Finanzas y Presupuesto de la Asamblea Nacional, Le Thanh Van, opinó: “Creo que para la gobernanza nacional, es más importante la calidad de los funcionarios. Los cargos de dirigencia deben tener amplios conocimientos, en general, y sobre la gestión, en particular. Además, deben administrar el orden social según las aspiraciones de la mayoría. Asimismo, hay que dar autonomía a la ciudadanía y las empresas para desarrollar el capital humano e impulsar la descentralización de autoridades y poderes”.
La posición y la fuerza de Vietnam después de casi 35 años de la aplicación del “Doi Moi” (Renovación) han aumentado mucho tanto en envergadura como en competitividad económica, con una situación sociopolítica que se ha mantenido estable y una confianza de la comunidad empresarial y la sociedad cada vez más elevada.
Según el viceministro de Planificación e Inversión Tran Quoc Phuong, en 2020, el hecho de que Vietnam lograra controlar el covid-19 y alcanzara un crecimiento positivo, aunque no cumpliera con los objetivos trazados, es una prueba clara de la capacidad de gobernanza nacional. El funcionario dijo: “Antes, al hablar de la capacidad competitiva intrínseca de la economía de Vietnam, evaluamos que la envergadura económica del país era de un nivel mediano y con una resiliencia baja. Sin embargo, tras atravesar un 2020 lleno de dificultades, vemos que con esa dimensión económica resistimos muy bien a los desafíos y mantuvimos el crecimiento de más del 2,5%. Es una lección valiosa de la gobernanza nacional. Constatamos que en las circunstancias más duras, la agricultura sigue siendo un pilar sólido para la economía del país”.
Renovar la forma de pensar sobre la gobernanza nacional significa crear pasos innovadores en cuanto a la legislación y las políticas a fin de optimizar los recursos financieros, humanos y de la tierra. El problema es cómo hacer para que la innovación y la creatividad se conviertan en una gran fuente de energía en cada ciudadano, empresa y organización. Este es el nuevo camino de desarrollo de Vietnam en la actual coyuntura.