Vietnam ha perfeccionado sin cesar el sistema jurídico para garantizar el derecho a la información. Ejemplo de ello son las leyes de Prensa (2016), de Acceso a la Información (2016) y de Seguridad Cibernética (2018), así como el Decreto sobre "Gestión, prestación y uso de servicios de Internet e información online". Estas legislaciones cumplen con las normativas del Estado de Derecho socialista, de conformidad con la Constitución de 2013, que garantiza la libertad de los ciudadanos en el ciberespacio.
Concretamente, la Ley de Prensa de 2016 estipula la libertad de expresión de la ciudadanía en los medios de comunicación, lo que permite opinar sobre la situación del mundo y el país, participar en la construcción de ideas y la implementación de pautas de desarrollo nacional, las políticas del Partido Comunista y las leyes del Estado, además de aportar opiniones y presentar denuncias en la prensa sobre los asuntos relacionados con las organizaciones del Partido, las agencias estatales, las instituciones sociopolíticas y profesionales, los colectivos y particulares. Mientras, la Ley de Acceso a la Información de 2016 estipula que los ciudadanos tienen derecho a recibir información adecuada, precisa y oportuna, así como expresar opiniones, quejas, demandas y denuncias contra las acciones violatorias. Entretanto, la Ley de Seguridad Cibernética de 2018 afirma las regulaciones del Estado de Derecho de Vietnam que respetan y garantizan los derechos humanos, incluido el del acceso a la información. Cabe destacar también el Decreto que enfatiza la determinación del Partido y el Estado de crear condiciones favorables para el desarrollo económico y el acceso de las personas en áreas desfavorecidas a los servicios de Internet e información online.
La nación indochina ha implementado también un sistema de recepción de comentarios y recomendaciones de ciudadanos y empresas a través del Portal del Gobierno. En este sentido, publica el Índice de Reforma Administrativa de los organismos estatales y el Índice de Satisfacción de la Ciudadanía para evaluar la calidad de los servicios públicos. Asimismo, estableció un Comité Nacional, para acelerar la construcción del gobierno electrónico y los portales de información de las agencias estatales en aras de proporcionar servicios públicos en línea y facilitar el diálogo directo entre los funcionarios y los pobladores, al igual que garantizar la libertad de expresión y elevar la eficiencia en la recepción de la información y las recomendaciones de las masas populares. Gracias a estas labores, muchas publicaciones en las redes sociales han sido verificadas y procesadas con rapidez por las autoridades de todos los niveles para asimilar las propuestas de la población al servicio del desarrollo nacional.
En esta senda, Vietnam ha impulsado el desarrollo de la prensa y los medios para reafirmar su papel de puente entre el Partido, el Estado y el pueblo, además de ser un foro social abierto para promover la democracia y proteger los derechos e intereses legítimos de las personas. En particular, la orientación al desarrollo de la prensa en la plataforma multimedia ha consolidado la capacidad para difundir la información de los medios a fin de satisfacer la demanda de la comunidad.
Estos resultados muestran que la libertad de expresión y acceso a la información en Vietnam ha avanzado notablemente. Sin embargo, como los otros países del mundo, las leyes vietnamitas mantienen restricciones en algunos casos, de conformidad con el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Esta labor tiene como objetivo respetar los derechos legítimos, el prestigio y el honor de los demás, así como proteger la seguridad nacional, el orden social, la salud pública y la ética social.
Los avances de Vietnam en la protección de los derechos humanos en el ciberespacio han sido reconocidos por la comunidad internacional y han contribuido significativamente al desarrollo y la integración mundial del país durante los últimos años. En especial, Vietnam continuará enalteciéndolos para garantizar la libertad, la felicidad y el desarrollo de la ciudadanía. Por ende, la tergiversación de estos logros es solo una opinión irrelevante de las personas reaccionarias al progreso social.