El TLCAN fue firmado el 12 de agosto de 1993 y entró en vigor el 1 de enero de 1994. Durante los 25 años de su despliegue, ha contribuido sustancialmente al crecimiento económico de los estados miembros. Según la estadística, el intercambio comercial entre los tres países superó los mil 200 millones de dólares en 2017, siendo Estados Unidos el mayor mercado de exportación tanto de Canadá como de México.
Sin embargo, durante su campaña electoral, el presidente estadounidense, Donald Trump afirmó en repetidas ocasiones que ese documento es uno de los peores de la historia y lo atribuyó a la pérdida de millones de empleos en su territorio, beneficiando más a los otros países firmantes.
Acuerdo preliminar Estados Unidos-México
Estados Unidos no hace concesiones en el sector automovilístico (Foto: hanoimoi.com) |
El acuerdo preliminar recién alcanzado entre Washington y Ciudad de México al menos mostró una señal alentadora para superar el estancamiento de las negociaciones en los últimos tiempos. Este consenso temporal minimiza las diferencias principales causantes de dicho problema tales como las regulaciones del origen de los automóviles, los conflictos de interés y la agricultura. En este sentido, ambas naciones acordaron que el 75% de cada vehículo se fabrique en uno de los dos territorios frente al 62,5% concretado en la última edición del tratado para impulsar la fabricación automovilística regional y la creación de empleos para la población local.
Especialistas evaluaron que este artículo beneficia más a Estados Unidos porque los componentes y repuestos hechos en ese país ocupan el 40% del valor de cada vehículo hecho en la nación azteca para su exportación al país vecino. Ambas partes afirmaron que el documento expirará en 16 años y será renovado cada 6 años para tranquilizar a los inversores.
Otra concesión de la Casa Blanca es abstenerse del establecimiento de las barreras comerciales destinadas a proteger sus productos agrícolas estacionales frente a los procedentes de México.
Aunque este tratado es calificado de “efectivo” por Donald Trump, no es suficiente para reemplazar el anterior debido a la ausencia de Canadá, uno de los 3 miembros firmantes.
Señales alentadoras de Canadá
Después del acuerdo conseguido entre México y Estados Unidos, este último y Canadá apoyaron una negociación integral sobre el renovado TLCAN para acelerar su aprobación. En esta senda el proceso de diálogo parece más favorable. Los esfuerzos mexicanos han ayudado a Ottawa a promover una negociación práctica con la Casa Blanca. Mientras, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau mostró su optimismo sobre la posibilidad de conseguir un acuerdo con el país vecino el 31 del presente mes. Después de semanas de ausencia en los diálogos en Washington, Canadá regresó a la mesa de negociación, en espera de una medida fructífera del estancamiento duradero.
La perspectiva de alcanzar el renovado TLCAN es cada vez más clara. Los inversores ponen la confianza en ese itinerario y esperan que Canadá haga concesiones en el sector lácteo para superar una de sus mayores diferencias con Estados Unidos. Esto contribuirá a mantener una cooperación comercial estable entre las 3 naciones firmantes del nuevo acuerdo.