Turistas extranjeros indagan sobre la identidad cultural de la etnia Thai en la provincia norteña de Dien Bien. (Foto: dangcongsan.vn) |
La región del noroeste está formada por seis provincias: Hoa Binh, Son La, Dien Bien, Yen Bai, Lai Chau y Lao Cai, con un enorme potencial turístico, una naturaleza magnífica, una cultura única y una historia heroica. Está llena de puntos turísticos como la montaña del Fansipan, famosa por ser el techo de Indochina, con 3 mil 143 metros sobre el nivel del mar; el balneario de Sa Pa, el paso de O Quy Ho, las mesetas de Sin Ho y Moc Chau, las terrazas de arroz de Mu Cang Chai, el lago Pa Khoang, la reserva natural de Muong Phang o el valle de Mai Chau. Sus paisajes salvajes atraen a los viajeros, tanto vietnamitas como extranjeros, que aman la naturaleza y la belleza pacífica. Tran Thu Ha, una turista de Hanói que visitó Lai Chau, dio a conocer: “Decidí explorar esta zona porque los paisajes son grandiosos y el aire es puro. Los lugareños ahora dependen del turismo comunitario para salir de la pobreza de manera sostenible y prosperar en su tierra natal. Pasé un tiempo realmente maravilloso con ellos”.
El noroeste es el hogar de un gran número de grupos minoritarios con una auténtica y colorida diversidad cultural y gastronómica. Se encuentran aquí los étnicos Tay, Nung, Thai, Muong, Mong, Dao, Kho Mu, Ha Nhi, Xo Dang y Pa Then, entre otras.
Los visitantes quedarán fascinados por su hábitat, su forma de vida, sus fiestas, sus costumbres, sus cantos y bailes folclóricos, y su vestimenta tradicional. La región ofrece una cocina sencilla, pero deliciosa y elaborada con productos locales.
Un homestay en la provincia norteña de Hoa Binh. (Foto: VNA) |
En los últimos años, se han creado muchas cooperativas de turismo comunitario en aldeas. La familia de Dieu Van Vinh, un étnico Thai de la comuna de Muong Chien, provincia de Son La, hospeda a turistas en una casa de huéspedes desde hace tres años. El hombre compartió lo siguiente: “En 2019, dimos la bienvenida a cientos de turistas vietnamitas y extranjeros. Aquí, ofrecemos servicios de alojamiento y gastronomía. A los turistas les encanta nuestra cocina tradicional”.
Durante los últimos años, la región del noroeste ha desarrollado muchas modalidades turísticas, con base en la explotación y la promoción del valor de los paisajes naturales y los patrimonios culturales tangibles e intangibles. Para mantener de manera sostenible la afluencia de visitantes, las autoridades locales están trabajando para aumentar la conciencia de las comunidades étnicas sobre los beneficios del turismo comunitario centrado en la preservación cultural y la protección del medio ambiente.
Actualmente, se ofrecen recorridos por las aldeas de los grupos minoritarios, para disfrutar de la cocina tradicional e indagar en la vida cotidiana de los autóctonos. Los turistas también pueden experimentar las temporadas agrícolas estacionales y disfrutar de los maravillosos paisajes que crean las flores de melocotón y alforfón, y las terrazas de arroz.
Mejorar la calidad de los tours y servicios también es crucial para que los excursionistas puedan extender su estadía en esta región.