Cada día, a las 7 de la noche, la familia de Nguyen Thi Kim Dung, en el distrito de Ba Dinh, Hanói, se reúne para cenar, charlar y actualizarse de las últimas noticias sobre la situación epidémica en el país y el mundo. Desde que estalló la cuarta ola de covid-19 en Vietnam, Kim Dung trabaja desde casa. Como intérprete de una empresa extranjera en el distrito de Cau Giay, antes de que se implementaran el distanciamiento social en la capital vietnamita, a menudo llegaba tarde a casa, por lo que rara vez podía tener cenas así con su familia.
Kim Dung dijo: “Debido a la naturaleza de mi trabajo, solía tener que asistir a reuniones que ocurrían muy tarde con socios extranjeros, por lo que muchas veces cuando llegaba a la casa ya eran las 8 o 9 de la noche. Ahora, tengo más tiempo para pasar con mi familia. Me doy cuenta de que la vida no se trata sólo de trabajo. Durante la epidemia, pasar tiempo con los seres queridos es lo más importante. Estando en casa, tengo más tiempo para hablar con mis padres y ayudarles con las tareas del hogar”.
 Las comidas con todos los miembros del hogar presentes son buenas ocasiones para estrechar la unión familiar. (Foto de ilustración: bvhttdl.gov.vn) |
Anteriormente, Nguyen Thanh Phong, radicado en el distrito hanoyense de My Dinh siempre estaba ocupado con viajes de negocios. Ahora, debido al covid-19, que le obliga a quedarse en la casa, el hombre puede pasar más tiempo con sus hijos y ayudarles en sus estudios.
Thanh Phong expresó: “En la coyuntura complicada del covid-19, mis dos hijos tienen que estudiar desde casa. Los niños son muy activos, por eso para ellos quedarse en casa todo el tiempo es muy aburrido. Sin embargo, mi esposa y yo siempre les aconsejamos limitar las salidas a la calle y los contactos con otras personas para evitar contagiarse de coronavirus. Todos los días les ayudamos a repasar sus lecciones. También les enseñamos juegos tradicionales para que no dependan de computadoras u otros juguetes electrónicos. Esto, al mismo tiempo, ayuda a fortalecer el vínculo entre los miembros de la familia”.
Estos son sólo dos ejemplos de entre más de 1,9 millones de hogares en Hanói que están acatando el distanciamiento social para luchar contra el covid-19. Al principio, surgieron numerosos inconvenientes. Pero muchas familias se han adaptado y los han transformado en oportunidades para estrechar su conexión.
La maestra en psicología social Ngo Thanh Thuy, del Instituto de Ciencias de la Educación de Vietnam, destacó el papel de los lazos familiares en el contexto actual, diciendo lo siguiente: “El covid-19 está teniendo un gran impacto en la psicología de las personas. En particular, el prolongado distanciamiento social puede provocar estrés, depresión y ansiedad. Según un reciente estudio de la empresa estadounidense de investigación y análisis de mercado The Harris Poll, hasta el 84% de los encuestados dijeron que tenían al menos un síntoma de una enfermedad mental relacionada con el distanciamiento físico u otras medidas de bloqueo debido al covid-19. Para superar esta situación, cada persona debe mantener el optimismo, crear alegría para sí misma y buscar a amigos y familiares para compartir. En esto, la familia juega un rol importante. La conexión entre los miembros ayudará a cada persona a superar la pandemia”.
 Para quienes se encuentran en primera línea de la lucha contra el covid-19, la familia constituye un apoyo espiritual para que cumplan sus misiones. (Foto de ilustración: congdoanytevn.org.vn) |
En la zona de tratamiento para pacientes con SARS-CoV-2 en el Hospital Thong Nhat, en Ciudad Ho Chi Minh, los médicos del Hospital Bach Mai de Hanói están haciendo todo lo posible para atender a los contagiados. Son voluntarios que llegaron a principios de agosto a la urbe del sur para ayudar en el combate contra el covid-19. Por eso, han estado lejos de sus familias por más de un mes. Para quienes están en primera línea de esta batalla como ellos, la conexión familiar no se refleja en el hecho de que los miembros permanezcan juntos para realizar actividades destinadas a fortalecer la unión familiar para las cuales normalmente no tienen tiempo, sino en las palabras de aliento, la comprensión y el cariño.
Ta Dinh Do, anestesiólogo del Hospital Bach Mai que está participando en la prevención y el control de la epidemia en Ciudad Ho Chi Minh, compartió: “A veces me siento muy agotado y muy estresado. Pero todos los días hago videollamadas para platicar con mis padres, mi esposa y mis hijos: Sus voces y palabras de aliento me dan la fuerza y la motivación para seguir completando la misión”.
La pandemia de covid-19 está provocando grandes cambios en la vida de muchas personas. Sin embargo, también brinda una oportunidad para que reconsideremos los valores fundamentales de la vida, especialmente el valor del hogar, para que cada persona aprecie más a sus seres queridos y se esfuerce por construir y preservar la felicidad familiar. Solo así, cada familia - célula de la sociedad - se volverá sana y sólida, contribuyendo a repeler el coronavirus.