En gran parte de las localidades vietnamitas, las clases son impartidas en formato híbrido, tanto en su modalidad presencial como online, salvo las provincias y ciudades sin casos de covid-19 en 14 días o más. En este contexto, los docentes han tomado iniciativas para adaptar a sus alumnos al nuevo estilo de estudio y garantizar la calidad de las actividades docentes.
“Para que las clases sean más atrapantes para los alumnos, aumentamos la aplicación de la tecnología informática en el diseño de las actividades docentes”.
“Motivamos la interacción de los alumnos de diversas formas. Por ejemplo, los dividimos en grupos para debatir los temas que planteamos, y los maestros aparecemos cuando nos necesitan. O utilizamos el chat para que los estudiantes escriban sus respuestas a las preguntas que hacemos. Eso también aumenta la interacción entre maestros y alumnos”.
La ceremonia de apertura especial del año escolar 2021-2022: en casa y ante la televisión. (Foto: laodong.com.vn) |
Aun así, para los alumnos de primaria, especialmente para los de primer grado, es difícil recibir las lecciones a distancia. Por ello, la conexión estrecha entre los docentes y los padres a través de plataformas digitales como Zalo resulta decisiva para garantizar la calidad de la educación, ya que los maestros no pueden enseñar directamente a los niños cómo mantener su postura en el pupitre y cómo escribir correctamente.
Al respecto, Nguyen Thi Lan Phuong, rectora de la escuela primaria de Phu Do, en Hanói, dijo: “Para que las clases en línea de los alumnos de primer grado sean eficientes, es muy necesaria la participación de sus padres, en la preparación de las condiciones, los instrumentos y espacios adecuados para el estudio de sus hijos. Ellos también deben ser quienes manejen los softwares de educación bajo la guía de los maestros. En síntesis, los padres deben acompañar a sus pequeños, sobre todo en los primeros momentos de su participación en las clases virtuales”.
Alumno de primaria en una clase online. (Foto: dantri.com.vn) |
Cambiar para adaptarse, es el lema enarbolado por el sector de la educación en este nuevo curso escolar. Cada localidad opta por un proyecto diferente dependiendo de la situación del covid-19 en el lugar. De igual manera, en los lugares en los que no se ha registrado infección alguna por más de 14 días, también se elaboran programas adecuados a diferentes escenarios. Pham Anh Tuan, director del Servicio de Educación y Formación de la provincia norteña de Ha Nam, dio a conocer: “Las escuelas prestan mucha atención a la enseñanza y el estudio, así como a la prevención de la epidemia. Tanto los maestros como los alumnos son muy conscientes de la importancia de cuidar de su salud y seguir las medidas preventivas, usando mascarillas y gel antibacteriano y midiendo diariamente la temperatura corporal. En el tiempo de recreación, las actividades colectivas de los estudiantes se reducen al mínimo ante los latentes riesgos de contagio en la comunidad”.
Los inconvenientes son imposibles de evitar, por eso, en el proceso de aplicación, el Ministerio de Educación y Formación realiza con frecuencia reajustes para adaptarse a la situación. En cuanto a la evaluación de los alumnos en esta época pandémica, el titular de la cartera, Nguyen Kim Son, afirmó: “En lo inmediato, mientras seguimos con los programas de enseñanza a través de la televisión o con computadoras, no realizaremos exámenes ni clasificaciones para los de primer y segundo grados hasta que retornen a las clases presenciales. En el caso de que estas no puedan realizarse cuando llegue el término del curso, entonces tomaremos una decisión adecuada”.
El Ministerio de Educación y Formación también puso a disposición del magisterio una amplia fuente de lecciones digitales para apoyarlo en el momento en que se deben impartir clases en línea. Las localidades esperan que el Gobierno despliegue pronto la vacunación a los alumnos para que puedan regresar a sus escuelas con seguridad.