El primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, en la reunión. (Foto: VGP)

La cita tuvo lugar justo después de que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y los bancos centrales de varios países reajustaran sus tasas de interés.

En la ocasión, el jefe del Gobierno hizo hincapié en la situación complicada, impredecible y sin precedentes que se está viviendo en el mundo, con el aumento de la inflación, la devaluación de las monedas de muchos países, la feroz competencia estratégica y el cambio de orientaciones políticas en varias naciones. Dijo que esto ha ejercido profundos impactos en Vietnam en muchos campos, especialmente en la importación y exportación, los precios de la gasolina y el petróleo, y también de los insumos.

Instó a las carteras a monitorear de cerca la situación económica nacional y mundial, y mejorar su capacidad de análisis y pronóstico, además de adoptar soluciones oportunas y adecuadas en la gestión económica.

Asimismo, subrayó las tareas claves actuales, centradas en continuar manteniendo la estabilidad macroeconómica, controlar la inflación, asegurar equilibrios importantes, y promover la recuperación y crecimiento económico, además de garantizar la prevención y control del covid-19, especialmente con la aceleración de la vacunación contra esa enfermedad.

Patentizó la necesidad de promover la reestructuración económica y renovar el modelo de crecimiento, intensificar la aplicación de ciencia y tecnología, aparte de agilizar la transformación digital e impulsar la economía verde y circular, y por último adaptarse al cambio climático creando así una base para el desarrollo sostenible.