A través de un comunicado oficial, explicó que se prevén la prohibición de entrada en el territorio de la UE y la inmovilización de bienes a 82 miembros de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán y una entidad policial encargada de delitos cibernéticos, así como una la denegación de exportar a Irán maquinaria que pueda ser utilizada para la represión interna y equipos de vigilancia de las telecomunicaciones. Las medidas, introducidas en 2011, fueron prorrogadas desde entonces cada año.
El mismo día, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también incluyó en la lista negra de organizaciones terroristas internacionales a los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica. “Este paso sin precedentes, liderado por el Departamento de Estado, reconoce la realidad de que Irán no es solo un Estado patrocinador del terrorismo sino que la Guardia Revolucionaria participa activamente en la financiación y la promoción del mismo como una forma de gobernar”, anunció la Casa Blanca en un comunicado.