Estas medidas se aplican a la circulación de semillas de trigo, maíz, colza y girasol en cinco países: Polonia, Hungría, Eslovaquia, Rumania y Bulgaria.
La CE dijo que tales restricciones son necesarias para prevenir una crisis de excedentes de productos agrícolas en los países de Europa del Este.
Anteriormente, este órgano prohibió del 2 de mayo al 6 de junio la importación de semillas de trigo, maíz, colza y girasol originarias de Ucrania a Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumania y Eslovaquia.