Una refinería cerca del río Irtysh en Omsk, suroeste de Siberia, Rusia. (Foto: Nsenergy Business/VNA) |
“Si llegan a imponer restricciones a los precios, simplemente no les suministraremos petróleo y productos derivados a las empresas o países que impongandichas restricciones”, subrayó el viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, en declaraciones citadas por la agencia de noticias Tass.
El miembro del Ejecutivo ruso considera que la “interferencia” en los mecanismos del mercado de la industria petrolera únicamente la desestabilizará y causará una crisis energética a escala mundial. Según Novak, esto hará que los consumidores europeos y estadounidenses, que ya están pagando un elevado precio por el crudo, paguen precios aún mayores si se cumple esta limitación.
Los miembros del grupo formado por las siete mayores potencias políticas, económicas en el mundo occidental: Estados Unidos, Japón, Alemania, el Reino Unido, Francia, Canadá e Italia, se reunieron el 2 de septiembre para debatir el plan de imponer un techo a los precios del petróleo ruso.