El profesor Ruvisley González Sáez, del Centro de Investigaciones de Política Internacional (CIPI), enfatizó que, pese a la volatilidad global, el país ha mantenido la estabilidad gracias a una diplomacia multilateral y una visión a largo plazo. “De ser uno de los más pobres en los años ochenta, Vietnam ha alcanzado hoy la categoría de renta media y persigue ser una nación desarrollada en 2045”, recordó.

Uno de los pilares de su éxito ha sido la diversificación de mercados. Aun bajo aranceles elevados en la guerra comercial con Estados Unidos, en 2024 registró un superávit de 123 000 millones de dólares. González Sáez subrayó que Hanói ha potenciado la inversión norteamericana y estrechó lazos con América Latina para disminuir su dependencia de Washington.

El programa rememoró la normalización de relaciones entre Hanói y Washington en 1995, cuyo trigésimo aniversario se celebra en 2025, y apuntó que, pese a los avances, aún subsisten diferencias.

Asimismo, destacó el creciente interés europeo tras la reciente visita del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y los acuerdos por 305 millones de euros, que consolidan a Vietnam como un socio estratégico tanto económico como geopolítico.

Con un crecimiento medio de un 6,2 % entre 2020 y 2024, y un 7,08 % en 2024, Vietnam se erige como un ejemplo de transformación notable, gracias a un liderazgo sólido, estrategias sostenibles y su capacidad para convertir retos globales en oportunidades.