Foto de ilustración: Xinhua/VNA

La reducción del crecimiento económico se debe en parte a que las perspectivas económicas de China no cumplen con las expectativas. En consecuencia, es probable que la economía china crezca alrededor del 4,4% el próximo año, menos del pronóstico anterior del 4,8%, en el contexto de las dificultades inmobiliarias, el aumento de la deuda y la lenta reapertura posterior a la epidemia.

La previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) del gigante asiático este año se mantiene en el 5,1 %. Mientras, se espera que el de la región de Asia Oriental y Pacífico alcance el 5% este año y el 4,5% el próximo.

Esta previsión es inferior a la de abril con un 5,1 % este año y del 4,8 % el próximo. Sin embargo, este resultado aún muestra que el ritmo de crecimiento económico en estas dos regiones sigue siendo más rápido en comparación con la de otros mercados emergentes.