Antigua aldea de Duong Lam por conservar entorno turístico

Quách Đồng- Thu Hoa
Chia sẻ
(VOVWORLD) - A 40 kilómetros al oeste de Hanói, el antiguo poblado de Duong Lam es un destino atractivo para quienes visitan la capital vietnamita. Los lugareños prestan especial atención a la protección del medio ambiente desde hace muchos años para conservar las características de una aldea típica del norte del país, como la imagen de los banianos, la casa comunal, las pagodas y los templos.
Antigua aldea de Duong Lam por conservar entorno turístico - ảnh 1 La pagoda de Mia, situada en la comuna de Duong Lam. (Foto: vhnt.org.vn)

Duong Lam es conocida por ser la única aldea donde nacieron dos héroes que marcaron la historia de Vietnam, Ngo Quyen y Phung Hung. Alberga hoy 97 casas antiguas, 10 de ellas reconocidas por el Estado, y 50 reliquias compuestas por templos, pagodas y pozos que crean un valioso patrimonio cultural.

La residencia de Nguyen Van Hung, en la comuna de Mong Phu, figura entre las más antiguas en Duong Lam. Detrás de una puerta estrecha construida con laterita típica de la localidad y un enrejado de flores, se conserva una singular arquitectura caracterizada por cinco habitaciones, un gran patio en el medio de la casa y las paredes de laterita, que se han vuelto de un color gris-marrón con el tiempo. La vivienda se ha mantenido intacta durante doce generaciones, y ahora es una dirección popular para numerosos turistas tanto nacionales como extranjeros.

Para promover de manera sostenible el turismo allí, los miembros de la familia de Nguyen Van Hung prestan especial atención a la protección ambiental. El propietario añadió: “La compañía de higiene ambiental de Duong Lam realiza un buen trabajo para promover el turismo local. Por la mañana, un grupo de empleados recolecta los desechos que cada casa deposita frente a su puerta. Como resultado, el entorno aquí siempre está limpio”.

Antigua aldea de Duong Lam por conservar entorno turístico - ảnh 2  La casa de cerca de 400 años de existencia de Nguyen Van Hung. (Foto: vietnamnet.vn)

Duong Thi Lan, propietaria de una casa con casi 400 años de antigüedad, ofrece servicios de ‘homestay’, la cual siempre está llena de visitantes. Fue construida por el mandarín Do Doan Chinh y está catalogada como una vivienda antigua de primera categoría. Diariamente, la familia de Lan acoge de 50 a 60 turistas. Muchos de ellos se hospedan aquí para experimentar la vida cotidiana en un entorno rural. No hay basura en la casa. Esto se debe al trabajo de las miembros de la Asociación de Mujeres local, quienes siempre se encargan de guiar a los turistas y limpiar, según dio a conocer Duong Thi Lan. “Priorizamos los temas relativos al medio ambiente. Por ejemplo, explicamos cómo eliminar el uso de bolsas y desechos de plástico. Los visitantes son muy conscientes de preservar el medio ambiente y el entorno turístico. No tiran desperdicios y son ecológicos”, agregó.

Los guías de viaje también se comprometen a proteger el medio ambiente junto a los lugareños. La señora Ha Thi Thu Huong, una aldeana dedicada a este oficio, siempre aconseja a los visitantes tirar la basura en el lugar correcto. Especificó: “Muchos viajeros se quedan admirados ante la belleza y la antigüedad de nuestro poblado, especialmente en las costumbres, la arquitectura y la cultura autóctonas. Siempre les decimos que después de usar los productos, deben tirar los desechos en el lugar correcto”.

Según el vicepresidente del Comité Administrativo de las Reliquias de la aldea, Nguyen Trong An, alrededor de 50 mil turistas nacionales y extranjeros visitan la aldea cada año. Las autoridades locales instaron a los hogares a apoyar activamente la conservación ambiental. Además, los desechos deben recogerse de acuerdo con las normas y el horario establecidos, predominantemente por la noche para no perjudicar las actividades turísticas, añadió.

La responsabilidad en la protección del entorno ha creado cambios positivos en la fisonomía de Duong Lam, en particular, y otros lugares turísticos y gremios tradicionales, en general.

comentar