Después de un largo período de operaciones discretas, el 27 de noviembre último las fuerzas del HTS en el norte de Siria lanzaron repentinamente ataques contra territorios controlados por el gobierno del presidente Bashar Al-Assad. Ante la resistencia inesperadamente débil del ejército sirio, en sólo 10 días HTS ocupó muchas ciudades sirias clave y el 8 de diciembre entró en la capital, Damasco, derrocando al gobierno actual.

El ejército del gobierno sirio colapsa rápidamente ante el ataque de los rebeldes. (Foto: AFP/VNA)

Colapso repentino

El rápido colapso del gobierno del presidente Bashar Al-Assad sorprendió a todas las partes, incluidos importantes aliados sirios. Durante los 10 días del ataque de HTS las fuerzas del ejército sirio apenas crearon una resistencia significativa, excepto durante los primeros días de intensos combates en la zona de Alepo, la segunda ciudad más grande de Siria.

Después de la caída de Alepo, el 30 de noviembre, el gobierno de Bashar Al-Assad también perdió otras ciudades clave, Hama y Homs, y el 8 de diciembre, las fuerzas HTS entraron en la capital, Damasco, con muy pocas bajas.

Según los observadores, la débil resistencia y el rápido colapso del gobierno de Bashar al-Assad se deben a diferentes causas.

En primer lugar, las embestidas del HTS se produjeron en un momento en el que el equilibrio de poder en Oriente Medio está cambiando. Hezbolá, una fuerza en el Líbano que lucha junto al gobierno de al-Assad, ha sufrido pérdidas en la guerra con Israel durante meses, e Irán también se encuentra en la etapa de un conflicto a gran escala con Israel, por lo que se ve obligado a actuar con cautela.

Mientras tanto Rusia, otro aliado clave de Siria, tiene que concentrar recursos en el conflicto en Ucrania, por lo que sólo puede respaldar al ejército sirio de manera limitada con una fuerza aérea relativamente pequeña que mantiene en la base de Hmeimim. Por lo tanto, el gobierno de Bashar al-Assad carecía del apoyo militar y de seguridad fundamental.

En segundo lugar, está el estado de agotamiento de la economía y el ejército sirios después de 13 años de feroz guerra civil que mató a millones de personas en ese país. Esta debilidad hizo que los principales ejércitos de Siria perdieran fuerza y carezcan de la motivación de combate necesaria. 

El experto en investigación del Instituto de Oriente Medio de Estados Unidos,  Ibrahim Al-Assil, comentó:

"Creo que el factor vital en la capacidad de HTS para repeler al ejército sirio es que tienen un objetivo, mientras que el ejército sirio no tiene un objetivo claro de por qué están luchando".

Impacto impredecible en la región

Esta masiva agitación política en Siria ciertamente tendrá impactos en la región de Medio Oriente y el mundo, debido a la importante posición geopolítica del país, así como a los complejos vínculos de seguridad entre diferentes fuerzas en Siria y factores externos.

En el futuro inmediato, la toma del poder por parte de HTS es tan rápida que la información y los comentarios sobre esta fuerza son todavía relativamente limitados.

Según el experto Ibrahim Al-Assil, la fuerza HTS se originó en Jabhat al-Nusra, una rama siria de la organización terrorista Al-Qaeda. Sin embargo, desde 2017 este movimiento ha realizado cambios en la dirección de abandonar gradualmente ideales extremistas y declarar repetidamente que quiere construir una sociedad islámica más moderna que las enseñanzas clásicas.

El hecho de que HTS haya dicho que quiere compartir el poder con otras fuerzas en Siria y seguir manteniendo contacto con el gobierno de Bashar al-Assad muestra algunas señales positivas sobre este grupo. No obstante, Ibrahim Al-Assil destacó que todavía es necesario ser cauteloso y evaluar a HTS en función de los próximos movimientos de este grupo.

Compartiendo esa opinión el experto en Siria del Consejo Atlántico, Qutaiba Idlbi, dijo que el impacto de los acontecimientos en Siria en la región dependerá en gran medida de los próximos meses, cuando las Fuerzas en Siria debatan el proceso de transición. 

En cuanto a las preguntas sobre los próximos enfoques del gobierno de Estados Unidos hacia Siria, el académico comentó:

"Para Estados Unidos no hay mayor interés estratégico en Siria que luchar contra el terrorismo, detener el flujo de refugiados, o impedir que las actividades de Irán se extiendan a otros lugares. Aparte de eso, Estados Unidos no tiene ningún interés real en imponer cuál será el próximo Estado sirio".

Mientras tanto, varios partidos promueven debates sobre el período de transición en Siria. Algunos países de la región declararon su disposición a ayudar a Siria a estabilizar la situación y desarrollar un plan de transición de poder.

En el Foro de Doha, en Qatar el 8 de diciembre, el enviado especial de las Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, afirmó que, aunque el proceso de reconstrucción del arruinado y dividido país será extremadamente difícil y complicado, esta es una oportunidad que no debe perderse.

"Los desafíos que tenemos por delante son enormes y escuchamos voces de inseguridad y miedo. Pero este es el momento de aprovechar la oportunidad para revivir Siria y la resiliencia del pueblo sirio proporciona el camino hacia un país unido y pacífico".

En la primera propuesta, la opositora Coalición Nacional Siria, una organización que reúne a las fuerzas políticas de la oposición siria en el extranjero, pidió un período de transición de 18 meses para preparar un borrador de una Constitución y avanzar hacia elecciones generales. Sin embargo, las fuerzas del HTS y las facciones internas en Siria no han respondido a esta propuesta.