Cada grupo étnico en el suelo vietnamita cuenta con sus propias festividades consideradas como herencias culturales especiales de la nación. En la región del Noroeste, esas celebraciones tradicionales se realizan principalmente en enero y febrero según el calendario lunar y son muy diversas. Podemos mencionar la fiesta “Long Tong” (ir al campo) de los Tay y Nung, la de “Cau An” (pedir paz) de los Thai y Muong, y la de “Gau Tao” (Invocar bendiciones) de los Muong, entre otras.

La procesion del espiritu del arroz de los Muong, en la comuna de Thu Cuc, del distrito de Tan Son, provincia de Phu Tho (Foto: tanson.phutho.gov.vn)

Las fiestas complacen en parte las aspiraciones de los autóctonos de retornar a sus raíces, además de reflejar las actividades religiosas de esas comunidades y equilibrar la vida espiritual de sus pueblos.

Nguyen Ban, funcionario encargado de la cultura en la provincia de Ha Giang comentó: “Los festivales primaverales, especialmente los vinculados con el campo y los cultivos, animan a los pobladores étnicos a llevar una vida más activa y desarrollar su producción. Por otro lado, mediante estas jornadas se fortalece cada vez más la unidad y el intercambio entre las comunidades”. 

Las mencionadas fiestas tienen características peculiares. Por ejemplo, en la de ir al campo de la etnia Muong, que se celebra a inicios del enero lunar, es curioso su rito de rendir culto al arroz. Las gavillas más hermosas se ofrecen a las deidades protectoras de la población, hay una procesión y luego las mejores semillas son repartidas a las aldeas para que emprendan la nueva producción agrícola. En el marco de este festejo se desarrollan varias actividades deportivas y juegos populares, lo que atrae a otras etnias de la zona. Las actuaciones artísticas de estas como los bailes típicos de los Dao, Tay y Nung contribuyen a enriquecer la jornada y a estrechar la solidaridad entre las comunidades.

Durante estos eventos se realizan juegos folclóricos como el de escondite, el “nem con” (lanzamiento de bolas de tela), competencias de canto, tiro con arco y carreras de caballos, entre otras.

La bandeja de ofrendas de una familia Muong en la ceremonia de inicio de los cultivos (Foto: periódico Hoa Binh)

Estas actividades representan una parte indispensable de las fiestas primaverales. El “nem con” de los Muong es uno de los más singulares. En este juego, muchachas y muchachos lanzan en alternancia vistosas bolas de tela multicolores hacia un círculo colgado en lo alto de un palo de bambú. Hoang Thi Quy, una autóctona expresó: “Yo tomaba parte en este juego cuando era niña y todavía hoy sigo lanzando bolas de tela en las fiestas aldeanas. Mantenemos vivas actividades como esta como parte de nuestra identidad cultural en beneficio de las generaciones venideras”.

Dien Bien, Lao Cai, Yen Bai y Ha Giang son las provincias con mayor población Mong. En el ambiente entusiasta del Año Nuevo, esta etnia celebra numerosas fiestas, entre ellas la de Gau Tao, cuyos rituales sirven para pedir a las divinidades un año venturoso. Cuando suena el primer pique de tambor comienza la parte festiva, en la que todos participan con mucha alegría mientras en algunos juegos populares los hombres demuestran su espíritu marcial y deportivo, como el empujón de palos y la competición de machacar arroz para cocinar pasteles tradicionales, así como en los fascinantes bailes con zampoñas. El ambiente inspirador de las festividades alienta a los étnicos a trabajar con mayor ahínco para contribuir a la construcción y al progreso de su comunidad.

Thao Thi Say, residente del distrito de Bat Xat, de la provincia de Lao Cai, participante en una jornada en la que reprodujeron esta celebración en la Aldea Cultural de las Etnias Vietnamitas dijo: “Nos sentimos orgullos de lograr mantener el legado cultural de nuestros antepasados. Después de jornadas como esta, reanudamos los cultivos con mayor entusiasmo”.

La esencia de las celebraciones tradicionales de los montañeses consiste en pedir abundantes cosechas y una vida próspera y feliz, en intercambio armonioso con otros grupos étnicos establecidos en la zona. Por eso, conllevan un gran significado humano y promueven sus hermosos rasgos culturales.