Con 500 años de existencia, la aldea de Luong Noi es la única del grupo Tay en la provincia de Cao Bang que mantiene intactas las técnicas y herramientas de tejer tradicionales. Aún se preservan aquí unos 30 telares antiguos.
Nong Thi Thuoc en su telar. |
Tejer brocados exige mucha paciencia, destreza y creatividad, y los motivos decorativos creados por las mujeres Tay es una combinación armoniosa de líneas y colores. Trabajan con ingenio el contraste de los colores sobre un fondo principalmente blanco, con lo que sus productos difieren mucho de los que crean otras minorías étnicas.
La investigadora de la cultura folclórica Hoang Thi Nhuan comentó: “Es muy importante la técnica de combinar los colores. Según la filosofía de los Tay, una flor de ocho pétalos puede representar las cuatro direcciones y ocho puntos cardinales del universo. Esta visión se refleja en los motivos de sus brocados, con estampas en relieve y otras que sirven de fondo. En estas últimas resaltan los colores radiantes de las primeras y simbolizan la tierra, la que nutre y da vitalidad a todo ser que surja de ella”.
Los Tay tienen más de 20 tipos de motivos decorativos. Pueden ser flores de ciruela, pera, melocotonero, albaricoque y otras especies florales que solo se pueden encontrarse en el lugar. También trabajan figuras de animales como ciervo, venado, caballo, pájaro y mariposa. La artesana Nong Thi Thuoc, residente en la aldea de Luong Noi, dio a conocer:
“Antaño, los Tay tejían tela de las fibras del algodón, con la que confeccionaban prendas de vestir, y luego frazadas, mosquiteros, cubiertas de almohadas y tapices, como regalos para las bodas. Reproducimos los motivos que hicieron nuestros antepasados, pero también los nuevos a gusto de distintos grupos de clientes. Pensamos en la creación de nuevas estampas en cualquier lugar en que estemos, incluso cuando trabajamos en el campo. Y cuando nos sentamos en un telar, cuidamos cada urdimbre y la colocación de los hilos de colores para tejer las piezas más bellas”.
Una pieza de brocado de la etnia Tay. |
Aunque trabajan con rústicos telares hechos simplemente de madera y bambú, sin el apoyo de ninguna tecnología moderna, las mujeres Tay son capaces de elaborar preciosos brocados con los cuales confeccionan trajes y otros productos originales, desde cubiertas, frazadas y sábanas, hasta portabebés. Según Thi Thuoc, cada artesana puede mostrar su espíritu innovador en los motivos que crea, sin necesidad de apoyarse en modelos.
“Debemos calcular cuántos colores e hilos usamos para tejer una flor. Los palos de bambú que se necesitan para crear una varía de 18 a cientos”, dijo.
La libertad de las tejedoras en su trabajo es una característica muy propia de la etnia Tay. Es más, son capaces de tejer estampas no en el lado derecho de la tela, sino en el revés. Es decir, cuando colocan palos de bambú en el telar, ya tienen programado cómo poner los hilos y pasarse la trama. De esta manera, cada vez solo puede crearse un motivo y si se quisiera hacer otro, habría que reprogramarlo. Esta es la única técnica. La estudiosa Hoang Thi Nhuan dio a conocer:
“Los motivos tradicionales de los Tay son flores de ocho pétalos, pero ahora en medio de la globalización y la integración, las artesanas se actualizan sobre las nuevas tendencias de decoración para satisfacer las demandas del mercado. Sin embargo, siempre tienen en cuenta insertar alguna estampa tradicional en los brocados que hacen por encargo”.
Paralelamente con el mantenimiento y la promoción del brocado, la aldea de Luong Noi presta mucha atención al desarrollo turístico y la construcción de una vida culta para sus pobladores. La localidad es uno de los destinos del Geoparque de Cao Bang reconocido por la Unesco.