Le Thi Huong (ropa azul) entrega cientos de desayunos gratis a trabajadores de la salud y pobladores sometidos a cuarentena médica en la ciudad de Ha Long. |
Durante los últimos tiempos, el espíritu de solidaridad, apoyo mutuo y consenso del pueblo vietnamita en la lucha contra la epidemia de Covid-19 se ha elevado en todas las regiones del país. En concreto, en respuesta al llamamiento del Gobierno de quedarse en casa en el tiempo epidémico, los ciudadanos de Hanói se están adaptando a las condiciones actuales de vida.
Nguyen Thi Huyen, residente en la capital vietnamita, compartió: “El edificio de apartamentos en el que vive mi familia alberga a muchos surcoreanos, por lo que se considera un área de alto riesgo de contagio. Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que no debemos preocuparnos demasiado, sino que debemos seguir estrictamente las instrucciones del Gobierno, contribuyendo a los esfuerzos comunes del país para contener la epidemia”.
El brote epidémico obligó a millones de alumnos a estudiar desde casa a través de Internet y la televisión. Por eso, numerosas familias aprovechan este momento para enseñar a sus hijos tareas del hogar. Un chico dijo: “Siempre estaba ocupado con los trabajos escolares, así que no hacía ninguna tarea del hogar. Pero ahora, al quedarme en casa, aprendo a barrer el piso y limpiar la casa y los muebles”.
Otra alumna dejó saber: “Cocino arroz y elaboro algunas comidas, además de limpiar la casa y lavar la ropa”.
Lo mismo sucedió en la provincia norteña de Quang Ninh cuando numerosas organizaciones sociales y particulares participaron activamente en la campaña de mensajería móvil promovida por la filial del Frente de la Patria provincial y el Ministerio de Información y Comunicación, cuyo objetivo era recaudar fondos para apoyar al personal médico, las fuerzas policiales y militares y los pacientes del coronavirus, así como a los que se sometieron a la cuarentena en los centros de aislamiento.
A pesar de ser afectada por la epidemia, Le Thi Huong, dueña de una tienda de comida en el barrio de Yet Kieu, de la ciudad de Ha Long, no dudó en donar cientos de desayunos gratis a los médicos y los pobladores sometidos a cuarentena en el hospital de campaña número 2. Ella expresó: “Mi esposo y yo cocinamos durante toda la noche. Cuando vimos que todos recibieron la comida, nos sentimos muy felices. El próximo lunes nuestra familia continuará haciéndolo nuevamente con el deseo de estimular a los doctores y enfermeros, así como a los portadores del coronavirus. Creo que cada persona, de acuerdo con su propia capacidad, puede contribuir al esfuerzo nacional contra la epidemia”.
Después del brote del Covid-19, las autoridades de Quang Ninh enfrentaron muchas dificultades para encontrar un área capaz de albergar a las personas sometidas al aislamiento médico. Ante tal situación, los responsables del Bao Minh Radiant, un hotel de cuatro estrellas del barrio de Hung Thang (Ha Long), decidieron ofrecer voluntariamente sus habitaciones para acomodar a turistas extranjeros que ingresaron a Vietnam de zonas epidémicas. El edificio eximió todos los gastos de habitaciones, comidas y servicios de lavandería para 157 huéspedes aislados allí.
Bui Thi Thuy Hanh, directora del referido hotel, dijo: “Queremos enviar el mensaje de que si el país es próspero y seguro, la gente se siente realmente segura. En el actual momento, cada persona necesita aumentar la conciencia sobre la responsabilidad ciudadana para, junto con todo el país, repeler la enfermedad de forma rápida”.
Ante las dificultades causadas por el coronavirus, las referidas acciones demuestran la tradicional solidaridad de los vietnamitas. Cada ciudadano deviene un soldado en la batalla contra la pandemia, esforzándose por crear una comunidad compasiva, unida y segura.