(VOVworld) – Ante la instalación ilegal de la perforadora petrolera Haiyang Shiyou 981 en la zona económica exclusiva y plataforma continental de Vietnam, el pueblo de este país indochino ha reforzado la unidad exhortando a Beijing a retirar su soporte perforador y poner fin a sus actos violatorios en el Mar Oriental. Desde los mítines y marchas pacíficas hasta las acciones de incentivo a la combatividad de los soldados en las islas lejanas, los vietnamitas se únen para aunar fuerzas en aras de defender la soberanía nacional en el Mar del Este.

A dos meses de la instalación ilegal de la plataforma de perforación petrolera Haiyang Shiyou 981, Vietnam ha moderado la compostura y demostrado su buena voluntad abogando por resolver el problema por vías de diálogo la disputa territorial. Sin embargo, Beijing calumnió internacionalmente a Hanoi con argumentos tergiversados y embistió barcos vietnamitas del orden público. Sin embargo, el pueblo de Vietnam no escatima esfuerzos para reforzar el bloque de unidad nacional en pos de defender la patria.

Unidad Nacional – lección legada desde el pasado

La reunificación del país en 1975 ha reafirmado el enaltecimiento del patriotismo y  la unidad nacional en la construcción y defensa de la patria. Esta lección mantiene intacto su valor hasta la fecha. Según Pham The Duyet, expresidente del Frente de la Patria, la historia de Vietnam ha evidenciado que la unidad nacional representa una fuente inagotable de fuerzas para derrotar a todos los invasores en cualquier situación. “Debemos insistir en aunar fuerzas populares para derrotar la agresividad con la justicia y aniquilar la atroz crueldad con la inteligencia. En mi opinión, hay que continuar enalteciendo la fuerza de los estratos sociales y apoyando la política del Estado para defender la soberanía nacional e integridad territorial en aras de la prosperidad del pueblo”, dijo The Duyet.

La fuerza de la unidad nacional en medio de tensiones en el Mar Oriental

Vietnam es un país amante de la paz. Sin embargo, si China persiste en invadir las aguas vietnamitas con actos provocativos y violatorios, todo el pueblo de este país indochino luchará codo a codo para defender la patria. Este criterio ha sido afirmado por el primer ministro Nguyen Tan Dung: “Apoyamos siempre la paz y la amistad sobre la base de la independencia, la autodeterminación, la soberanía nacional e integridad territorial. Nunca cambiamos estos territorios sagrados por alguna paz y amistad utópicas”.

Las respuestas de los estratos sociales a la infracción china reafirman que el patriotismo y la unidad nacional de Vietnam han sido enaltecidos durante tiempos. Los regalos y elogios han sido una fuente inagotable de estimulación para los combatientes de la Guardia Costera en el Mar Oriental.

Entretanto, compatriotas en el extranjero mantienen estrechos vínculos con el país natal. Se han realizado numerosos mítines y marchas pacíficas para rechazar las transgresiones de Beijing en las aguas vietnamitas. Según Nguyen Phu Binh, presidente de la Asociación de contacto con los vietnamitas en ultramar, algunos compatriotas recopilan documentos que evidencian la infracción china relativa a su absurda reivindicación territorial en el Mar Oriental. Además, numerosos eruditos nacionales en el exterior han mostrado en diferentes foros internacionales pruebas que reafirman la soberanía vietnamita sobre los archipiélagos de Hoang Sa (Paracel) y Truong Sa (Spratly). Gracias a esta labor, el mundo comprende la unidad nacional de Vietnam en la defensa de la patria. El también excanciller de Vietnam, Nguyen Phu Binh dio a conocer: “Cuando la patria sagrada es invadida, todo el pueblo mantiene la solidaridad en la defensa nacional. Esto es muy importante porque fluye en nosotros la sangre de Lac Hong cuya característica común reside en la defensa de la soberanía nacional. Si mantenemos este espíritu, lograremos mayor participación popular en esta lucha. Exhortamos a todos los ciudadanos a cumplir con la meta común de defender la soberanía nacional y el orgullo del pueblo”.  

La realidad muestra que la unidad nacional es la lección más preciosa de todas las etapas. En la guerra por la independencia del país, la solidaridad constituye un arma afilada para derrotar a cualquier enemigo mientras que en el período de paz representa el consenso de las capas populares para el desarrollo socioeconómico en aras de la prosperidad del pueblo. Esta tradición ha contribuido a ampliar las relaciones nacionales con el resto del mundo para que la comunidad internacional comprenda la justicia y la solidaridad del pueblo vietnamita en la lucha por la paz y los valores humanos.