(VOVworld) – Tokio llama a Beijing a respeta el fallo de la Corte Permanente de Arbitraje (CPA) con sede en la Haya (Países Bajos) sobre el pleito de Filipinas contra las reclamaciones infundadas de China en el Mar del Este (conocida intercionalmente como Mar de China Meridional), dijo el canciller japonés, Fumio Kishida en la reunión sostenida este 25 de julio con su par chino, Wang Yi,  al margen de la cuadragésimo novena Conferencia de Ministros de Relaciones Exteriores de la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia (ASEAN AMM-49), en desarrollo en Vientiane, Laos.

El canciller japonés, Fumio Kishida (i) y su par chino, Wang Yi, reunidos en Vientiane, Laos

El diplomático japonés urgió que China acate el veredicto de la CPA, que rechaza las irracionales reclamaciones de Beijing de territorios dentro de la “línea de nueve puntos” en estas aguas, considerándolo la decisión final y con el carácter vinculante.

El mismo día, el canciller japonés se reunió con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry y la ministra de Asuntos Exteriores de Australia, Julie Bishop, para tratar sobre la importancia de las soluciones pacíficas y legales a los diferendos. La cita tuvo lugar después de que China refutara dicho fallo de la CPA.

Tras la publicación de esta decisión, Japón, Estados Unidos y Australia emitieron sus respectivas declaraciones enfatizando que el veredicto de la CPA es “una vinculación final y legal” para las partes en disputas, incluidos China y Filipinas. También llamaron a respetar la decisión y resolver las contiendas por vía pacífica.

Por su parte, el presidente del Instituto de Amistad y Cooperación México-Vietnam (IACMV), Félix Castellanos Hernández, manifestó su absoluto apoyo al fallo de la CPA. En su comunicado enviado a la embajada vietnamita en México, destacó que la decisión de la corte internacional tiene un significado histórico, contribuyendo a resolver de manera pacífica las discrepancias en el Mar del Este.

Reafirmó el apoyo absoluto de su organización a la soberanía de Vietnam, en especial sobre los archipiélagos de Truong Sa (Spratly) y Hoang Sa (Paracel), al mismo tiempo alabó el compromiso de Hanoi en la garantía de la paz, seguridad, estabilidad y libertad de tránsito marítimo y aéreo en el Mar del Este y el punto de vista de la CPA formado según el apéndice 7 y la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar de 1982 (UNCLOS).