El primer ministro Pham Minh Chinh interviene en la conferencia. (Foto: VNA)

El jefe del Ejecutivo enfatizó que las vacunas siguen siendo un arma decisiva, junto con la mejora de la capacidad de la medicina preventiva y la atención primaria de salud. La vacunación es el derecho, la responsabilidad y el deber de cada ciudadano para protegerse a sí misma, a su familia y a la comunidad, aseguró.

También afirmó que el objetivo más importante ahora es controlar la epidemia, prevenir su rebrote, acelerar la recuperación y el desarrollo socioeconómico, proteger la independencia, la soberanía y la integridad territorial, además de construir una economía resiliente y autosuficiente, a la hora de acelerar la integración internacional y mejorar la calidad de vida material y espiritual de las personas.

“Nuestro objetivo más importante ahora es controlar la propagación del virus y evitar volver a sufrir lo que se vivió en el 2020. Debemos hacer todo lo posible para proteger la vida y la salud de los pobladores. Las medidas de prevención siguen siendo vistas como básicas, estratégicas, decisivas y de largo plazo. Mientras que el trabajo anti epidémico es una tarea que debe realizarse de manera regular y requiere la participación de todo el sistema político. La vacunación es derecho, obligación y responsabilidad de cada ciudadano para consigo mismo, su familia, la comunidad y la sociedad. Además, debemos prestar mayor atención a la prevención temprana de enfermedades y asegurar que cada persona tenga acceso a la atención médica lo antes posible, directamente desde los centros sanitarios de base", dijo.