La elección, celebrada el 8 de mayo, marca un hito histórico al tratarse del primer Papa de nacionalidad estadounidense. Con 69 años, el nuevo Pontífice domina varios idiomas: habla inglés, francés, italiano y español, y posee conocimientos de portugués, latín y alemán.
Colaborador cercano del Papa Francisco, se espera que León XIV continúe la línea reformista emprendida por su antecesor.