La vacuna Abdala desarrollada por Cuba (Foto: AFP/VNA)

De los 48 mil voluntarios que participaron en el ensayo clínico fase III, sólo 153 pacientes se contagiaron con el virus y entre ellos se encuentran 142 que recibieron un placebo y 11 inoculados con la vacuna, detalló el monitor principal de los estudios del CIGB, doctor Francisco Hernández.

El análisis estadístico de un mayor volumen de datos de las pruebas realizadas en las provincias de Santiago de Cuba, Granma y Guantánamo, arrojó estos resultados del inyectable, a casi un mes de informarse su eficacia del 92,28 % frente al covid-19.

El 9 de julio, el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed) —la autoridad reguladora cubana— autorizó el uso de emergencia de Abdala, una de las cinco vacunas desarrolladas en la isla. De esta manera, este fármaco ha pasado de ser un candidato a registrarse oficialmente como vacuna contra el covid-19. Con ello, se convierte en la primera vacuna creada en América Latina.

En un hecho relacionado, el CIGB también informó que Mambisa, otra de las cinco vacunas desarrolladas en la isla, está incluida en la lista global de inmunógenos por vía nasal que avanzan a la fase de ensayo clínico.