Los videos transmitidos por la aplicación “podrían estar sesgados a favor de las autoridades chinas, ansiosas de alimentar disturbios que puedan debilitar la imagen de la democracia”, establece la comisión en su informe, mientras que las redes sociales son acusadas de haber participado en la escalada de las recientes revueltas urbanas en Francia.
“El Gobierno está muy atento a las recomendaciones que se hacen, en particular sobre la protección de los menores”, reaccionó en Twitter la secretaria de Estado de la Infancia Charlotte Caubel, que aprueba especialmente la idea de bloquear la aplicación tras una hora de uso para menores.