Según la Constitución de Estados Unidos, todo presidente debe obtener la aprobación del Congreso antes de iniciar una campaña militar prolongada.
La votación se produjo en un contexto en el que, durante más de un mes, Estados Unidos ha realizado ataques aéreos contra barcos frente a las costas de Venezuela, y desplegado portaaviones nucleares y aviones de combate a las inmediaciones del país sudamericano, lo que ha incrementado la preocupación de que Trump ataque territorio venezolano.
Además, el mandatario estadounidense declaró públicamente que tiene capacidad para llevar a cabo ataques terrestres y ha permitido que la Agencia Central de Inteligencia (CIA, en inglés) opere secretamente en Venezuela. Sin embargo, la semana pasada, Trump afirmó no haber tomado una decisión sobre posibles ataques al país suramericano.