"La escala y la velocidad del descenso de Sudán hacia la muerte y la destrucción no tiene precedentes", advirtió.
También estimó que sin un fuerte apoyo internacional, Sudán podría convertirse rápidamente en un lugar de anarquía, extendiendo la inseguridad por toda la región.
 Refugiados reciben ayuda alimentaria en Bentiu, Sudán del Sur, el 6 de febrero de 2023. (Foto: AFP/VNA) |
A través de un mensaje de video cuando entró en vigor un nuevo alto el fuego temporal entre las Fuerzas Armadas de Sudán (SAF) y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), el jefe de la ONU dijo que cientos de civiles habían muerto y miles más habían resultado heridos desde que estallaron los enfrentamientos a mediados de abril.
En respuesta a este llamado, muchos países se han comprometido a contribuir a Sudán.
El ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, el jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, aseguró que el reino del Golfo proporcionaría 50 millones de dólares.
Berlín se ha comprometido, por su parte, a conceder 200 millones de euros en ayuda humanitaria a Sudán.
La administradora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Samantha Power, dijo que Washington donaría 171 millones de dólares adicionales al país africano.