El secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson (d) y el canciller ruso Sergei Lavrov durante una reunión en Washington, el pasado 11 de mayo (Foto: AFP/VNA) |
Recordó la retirada de 755 diplomáticos estadounidenses de su nación y agregó que esa orden es una de las acciones en represalia a la aprobación de las medidas punitivas por parte del Congreso de Estados Unidos
contra el país euroasiático.
El mismo día, la Embajada norteamericana en Moscú acusó a las autoridades rusas de prohibir el acceso de sus empleados a varios edificios en las afueras de esa ciudad, destinados a sus actividades recreativas.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso consideró “provocadoras” las acusaciones de Estados Unidos. Dijo que anteriormente, las autoridades del gobierno de Putin permitieron al personal norteamericano entrar en estas residencias hasta el mediodía del 1 de agosto para recoger sus pertenencias personales.