Al reunirse con el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, el ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, dijo que dicho ataque se produjo en un momento inadecuado, ya que la situación en esa nación se estaba estabilizando.

El ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu (Foto: Sputnik)

El mismo día, el canciller ruso, Sergei Lavrov declaró que Moscú pronto presentará evidencia de que las fuerzas de defensa aéreas sirias derribaron más de la mitad de los misiles disparados en los recientes ataques liderados por Estados Unidos.

“Nuestro personal general tiene una imagen muy clara de los ataques. Observamos que todo sucedía en tiempo real. Estamos listos para ser responsables de las estadísticas que proporcionaron nuestros militares”, dijo Lavrov en una entrevista con Russia Today.

También pidió a Washington y sus aliados que demuestren que todos sus misiles alcanzaron los objetivos. Antes, dijo que Rusia había decidido no suministrar su moderno sistema de defensa antiaérea S-300 a Siria a petición de los países occidentales, porque la medida podría desestabilizar la situación, aunque el sistema es puramente defensivo.