La prórroga de esta medida en relación con Cuba por otro año responde a los intereses nacionales, señaló Trump en un memorando dirigido a los secretarios de Estado y del Tesoro. Es la tercera vez desde que asumió su cargo que el inquilino de la Casa Blanca extiende la normativa aprobada durante la Primera Guerra Mundial y que en la actualidad solo se aplica contra la mayor de las Antillas desde que en 1962 el entonces presidente John F. Kennedy recurrió a esta ley para establecer el bloqueo.
Dicha legislación denominada Ley de Comercio con el Enemigo, aprobada por el Congreso Federal el 6 de octubre de 1917, le otorga al presidente la facultad para restringir la cooperación sectorial con países "hostiles" a Estados Unidos y la posibilidad de aplicar sanciones económicas en tiempo de guerra o en cualquier otro período de emergencia nacional, y prohíbe las actividades comerciales con el enemigo o aliados del enemigo durante conflictos bélicos.
El predecesor de Trump, Barack Obama usó las facultades ejecutivas de dicha ley para aumentar el intercambio con la isla caribeña y si bien significó un avance en las relaciones bilaterales se enfrentó siempre a la imposibilidad del levantamiento del bloqueo, una facultad que solo corresponde al Congreso norteamericano.
El bloqueo comercial, económico y financiero contra Cuba en el último año, de marzo de 2018 hasta abril de 2019, provocó pérdidas valoradas en cuatro mil 343 millones de dólares, convirtiéndose en una de las causas principales del desabastecimiento de alimentos y combustibles y de la dificultad para adquirir piezas de repuesto en la mayor de las Antillas.