Foto ilustrativa (Fuente: VNA)

En ese sentido, las entidades que establecen la tubería en el Mar Báltico sufren el bloqueo de bienes y la retirada de visados por parte del Gobierno norteamericano.

Estas medidas punitivas, a las que se opone la Unión Europea, se incluyeron en un extenso proyecto de ley de gastos de defensa para el año fiscal 2020, ratificado por Trump en la base de defensa aérea Andrews en las afueras de Washington.

El gasoducto, de casi 11 mil millones de dólares, tiene como objetivo duplicar las entregas de gas natural ruso a la principal economía de Europa, Alemania. Los legisladores estadounidenses afirmaron que la obra reforzará la influencia geopolítica de Moscú en el Viejo Continente.