El primer ministro Pham Minh Chinh durante su intervención en la conferencia. (Foto: VOV) |
En su intervención, el jefe del Ejecutivo subrayó que la política de vivienda y el mercado inmobiliario son factores clave para impulsar el crecimiento, elevar la calidad de vida y transformar la fisonomía del país. Recalcó que el desarrollo urbano debe ser rápido, pero sostenible, con especial atención a la reducción de la contaminación atmosférica y la prevención de la congestión vial.
Pham Minh Chinh destacó que la vivienda y el sector inmobiliario constituyen un canal decisivo para movilizar y distribuir recursos financieros, con fuerte efecto de arrastre sobre actividades como la construcción, las finanzas y la producción de materiales. Dentro de estas políticas, otorgó prioridad a la vivienda social, concebida para garantizar que los ciudadanos puedan acceder a la compra o al alquiler con opción de compra, asegurando así un derecho humano fundamental: el de una vida estable.
“El desarrollo de la vivienda social para personas de ingresos bajos y medios es una tarea ineludible. No podemos ser indiferentes a una política tan profundamente humanista. No sacrificaremos el bienestar social en aras de un crecimiento meramente cuantitativo. Si este segmento prospera, impulsará a su vez un ecosistema productivo más amplio”, enfatizó.
El programa de construcción de un millón de viviendas sociales en el periodo 2021-2030 avanza con firmeza. Hasta la fecha, se han puesto en marcha 692 proyectos, con más de 633.000 unidades previstas, de las cuales más de 110.000 ya han sido entregadas.